CAPITULO 12: CUANTO TE EXTRAÑE

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-¿Jack?- Cuestioné confundida

-Vine a dejarte el platillo que me diste esta mañana- Sus palabras eran lentas sin despegar la vista de Ethan

-Jack... Estoy acá- hable sacudiendo la mano sobre su rostro

- ¿Quién es tu amigo?- Sabía que lo preguntaría, Jack me entregó el plato y enseguida se colocó a mi lado pasando su brazo por mis hombros

-No soy estante- espeté quitando su brazo de mis hombros a lo que Ethan rió

-Bueno, te dejaré con tu amigo.... Hasta mañana Kim- Ethan se acercó a darme un beso en la mejilla, pero en seguida Jack no se lo permitió empujándolo levemente

-Nada de acercamientos cariñosos a mi chica- ¿Qué le pasa a este idiota? No soy su juguete

-¿Y tú quién eres?¿Mi padre?- dije burlona. No tiene derecho a venir e impedirme mis amistades, soy lo suficientemente mayor como para cuidarme sola.

-No te preocupes Kim- me guiñó un ojo y se retiró sin responder el acto infantil de Jack, el cual solo sacaba su lengua a espaldas de Ethan, di un golpe en el duro abdomen de Jack y soltó un gemido.

Entre a casa, intente cerrar la puerta, pero algo me lo impedía, el pie de Jack, el cual solo me miraba para que lo dejara pasar

-¿Se te ofrece algo?- Cuestione intentando cerrar la puerta

-¿Me dejas pasar?-

Gire mi cabeza hacia atrás fingiendo ver el reloj- lo siento, pero a esta hora no se reciben idiotas- sonreí forzosamente y con todas mis fuerzas, al fin, pude cerrar la puerta.

Con una sonrisa estúpida me dirigí a mi recámara ¿Por qué estaba tan feliz? Tal vez porque mire s Ethan, les cuento. Ethan es mi mejor amigo desde la primaria. Siempre salíamos juntos a loa hora de descanso y me hacía reír con las anécdotas familiares. Al paso del tiempo, sus padres se convirtieron en grandes amigos de los míos; cuando ingresamos al bachillerato Ethan y yo nos convertimos en súper amigos, junto con Vanesa, una de mis mejores amigas que conocí en la preparatoria junto a Ethan. Siempre hemos sido nosotros hasta hoy, Vanesa ingreso a otra preparatoria y Ethan tuvo que mudarse con sus padres a otra ciudad, Arizona, fue entonces que me quede sin Ethan... Estuvimos a punto de..... Bueno, no quiero recordarlo

Llegué a mi recámara y me senté en la orilla de la cama, hasta que mi celular timbró

Me dio mucho gusto volverte a ver, no sabes cuánto te extrañé, me gustaría volverte a ver, ¿Te parece si mañana te visito?

-Ethan

Al leer el mensaje mi corazón comenzó a latir demasiado, si no fuera humano diría que ya estuviera muerta.

De acuerdo, te espero en el desayuno a las 9:00 am

Bloqueé mi celular, coloque mi pijama y me recosté olvidándome de todo el mundo, pero, al recordar esta tarde con Ethan, no dude en volver a sonreír. ¡Ya! Escápense de mi mente estúpidas emociones, ¡Solo quiero dormir!

Comencé a gritar y patalear cuando de repente escuche una voz aguda.

-¿Estás bien?- al momento de escucharla pegue un brinco de mi cama y un grito salió de mis labios, juro que los vecinos pudieron escucharme

-¿Te parece que está bien?- Respondí exaltada pasando mis manos rápidamente sobre mi cuerpo con la respiración agitada

-Bastante bien- indicó pícaramente colocando una mano en su barbilla a lo cual bufé

-¿Qué haces aquí?- mi respiración comenzaba a controlarse

-Esperaba a que llegaras- se levantó del suelo y se colocó frente a mí- ¿Estás bien?- habló al mismo tiempo que inspeccionaba mi cuerpo

-Jack.....- me interrumpió

-¿Te hizo algo?- preguntó esta vez revisando mis mejillas

-Jack....- volvió a interrumpirme

-¿Estás segura que estás bien? Porque si no es así voy a ir por......-

-¡Qué si estoy bien por un demonio!- grité frente a su cara a lo cual quedó atónito. Literalmente exploté, ¿Por qué de un momento a otro de volvió tan protector? Fue tan solo una visita que ni dos horas duró.

-Huy, disculpe señora molestias- Levantó la voz- Parece que alguien está en sus días- susurró en mi oído, lo cual me enfureció más

- El que va estar en sus días pero creerme que todos- haciendo énfasis- Será otro si no se larga de mi casa- espeté entre dientes

-De acuerdo- Levantó ambas manos en forma de tregua- Hasta luego fiera- Exclamó al terminar de bajar la escalera que daba bajo mi ventana.

-¡AGH!- grité y escuche como el imbécil solo una carcajada, ¡Gracias por amargarme la noche Jack! Respiré hondo y decidí olvidarme de lo sucedido, me recosté, cerré mis ojos y sin pensarlo me quede dormida.

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Desperté, un mensaje en mi celular logró que aún más me despertara al ver el mensaje de Ethan

"Buenos días bonita, espero que hayas amanecido de lo mejor, llego en 30 minutos"

Mierda. Solo queda media haría para que llegue Ethan y yo aún sigo en pijama. Me levante rápidamente, tomé una ducha rápida y me cambie. Opté por usar unos shorts desgastados, unos converse blancos, una blusa gris y una sudadera larga de atrás.

Quedan tan solo 10 minutos, fui rápidamente al tocador y comencé a secar rápidamente mi cabello, lo cepille y lo acomodé. Coloqué algo de máscara en mis pestañas, labial tinto sin exagerar y listo.

Cuando la campanilla timbro, baje por las escaleras, y me pare de detrás de la puerta. Tranquila Kim, respira, solo es una visita ¿Qué podría pasar?

Abrí la puerta para encontrarme con dos chicos detrás de ella......

El vecinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora