La Entrevistadora [[Vegetta y tu]]

14. "¿Ya es hora?"

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Bien, como claramente no era el momento de presentarlo, lo tomé de la mano y lo arrastré hacia afuera cerrando la puerta a mis talones.

-No es que no quiera presentarte, es solo que no son como te los imaginas, lo aseguro- Aclaré ante su mirada de confusión.

-Bien, lo entiendo- Aún así parecía algo desilusionado.

Le di un beso en la mejilla y me sonrió sin mostrar los dientes.

-¿Vamos a tu casa?- Pregunté

-Cla...-No pudo terminar la frase. No pudo porque a mis espaldas alguien abrió la puerta. Y ese alguien era, por supuesto, mi padrastro. Uff, tuve que soltar la mano de Samuel porque estaba sudando, ya imaginen cuan aterrada estaba.

Tenia dos opciones, o mostrar mi miedo y hacerme la desentendida, o actuar con normalidad, como si la situación fuera exclusivamente planeada. Voy a optar por la segunda y en serio espero que Samuel me siga la corriente. Me volteé y mire a mi padrastro a los ojos.

-Daniel, él es...-¿Debía decir Samuel o Vegetta? creo que mi plan no esta funcionando en absoluto. Sorprendentemente, Samuel rió a mis espaldas y adelantó unos pasos para quedar frente a Daniel.

-Soy Samuel, encantado de conocerlo al fin.

Vaya, que esa no me la esperaba...
Samuel estiró su brazo, esperando la respuesta de Daniel, y ¡Adivinen qué! DANIEL LE DEVOLVIÓ EL SALUDO. Que esto no puede estar mas raro (e incomodo para mi).

-Daniel. -Respondió mi padrastro algo seco, pero venga que es un avance increíble.- ¿Van a quedarse aquí en casa?

¿Y ahora que contesto? Querer, pues no, no quería quedarme, pero ¿A donde iríamos? No puedo decirle que no vamos a quedarnos porque iríamos a casa de Samuel, ya que quedaría algo bastante... ¿mal? Sonaría a que me estoy escapando... <<Que es cierto>>.
Noté que ambos me miraban a mi, y pues claro, se supone que yo debía contestar.

-Eeee, si, claro. Solo un rato, porque... queríamos ir al parque luego. -Increíble excusa, aplausos. Necesito clases de actuación. Y rápido.

Nos adentramos en la casa y mi madre estaba en la cocina, puesto a que ya lo conocía se acercó a nosotros con algo mas de confianza.

-¿Que tal Samuel? -Dijo con una sonrisa. Me di cuenta de que él no sabía que contestar. Realmente yo nunca entiendo si esas preguntas son retóricas* o no... Él se limitó sonreír y estrechar su mano, también.
Daniel estaba algo como extrañado, supuse que no le gustaba mucho la idea de que mi madre hubiera conocido a Vegetta antes que él.

Luego ayudamos a mi madre a colocar la mesa, mientras que mi padre esperó sentado. Pude ver que le indicó a Samuel que se acercara, mientras yo continuaba ayudando a mi madre.

-¿Qué crees que esté diciéndole? -Le pregunté a mi madre.

-No se, la verdad. Se lo tomó mejor de lo que creí, ¿no lo notaste?- Me respondió. ¡Pues claro que lo noté!

Luego de que nos sentáramos y habláramos, para mi sorpresa, como una familia normal, nos despedimos y Daniel le dijo a Vegetta que fue un gusto conocerlo. A todo yo estaba algo como <<¿Quien eres y qué has hecho con mi padrastro?>>
Acto seguido, nos fuimos a casa de Samuel en su coche. En el camino, recibí un mensaje de Rychel.