Mortal Moon

Camino de humo

La tierra... Sumergida en una guerra entre los cuatro clanes, pueblos devastados y niños sin padres. Dolor, tristeza y agonía por todos lados, la tierra se miraba pérdida hasta que los cuatro clanes crearon la Luna Mortal, una alianza que regreso la paz al mundo y cada cien años los cuatro clanes regresan al lugar donde la crearon y la vuelven a firmar para que así la paz nunca acabe. La llamaron así porque se creó bajo la luz de la luna roja. Los clanes creyeron que sería mejor entrenar a personas para que cuiden de los humanos y la Luna Mortal se lleve a cabo sin presencias de criaturas malignas. Lo llamaron: la clave, este lugar esta bajo tierra, es un lugar enorme con todo lo necesario: casas, comida, agua, armas, etc. En este lugar las personas entrenan para cuidar a los humanos.

*******
800 años después...

-¿Lián? Lián... ¡DESPIERTA!- Caí al suelo gracias al grito de mi mejor amigo Drake quien ahora se encuentra riendondose de mi.

-¿¡Que te pasa!?- Grite enojada, no me agrada que me despierten así y el lo sabe.

-Ya vamos tarde al entrenamiento-

-A mi me vale el entrenamiento-

-¿Te enojaste?-

-No, como cres, a mi me encanta que me levanten así todas las mañanas-

-El sarcasmo no es necesario- Me dice serio

-Como sea, largo, me voy a vestir-

-Te esperaré afuera-

Drake salió de mi habitación y yo comenze a buscar mi ropa de entrenamiento. Mi cuarto como siempre esta hecho un desastre. Mi cuarto es muy grande: cuando entró lo primero que miró es mi cama color negra y dos mesas de noche a cada lado con lámpara encima de estas, luego enfrente de esta hay un escritorio con un cuchillo clavado en el y muchos libros y hojas con información de criaturas . A lado de este hay un armario de espejos debajo, de todo esto hay una alfombra gris y por ultimo las paredes estan pintadas de blanco con estantes llenos de libros de criaturas a las que no nos debemos acercar pero si las vemos hay que matarlas, en medio de una hay un balcón. Cuando limpio mi cuarto en realidad es muy elegante.
Termine de cambiarme y voy a verme a mi armario, mi atuendo consiste en un short de licra y una blusa negra de manga larga licra también. Con unas Van's negras con blanco. Enredo mi cabello castaño en una coleta alta y salgo de mi habitación para encontrarme a Drake besando a una peli negra. Él es muy guapo, tiene cabello negro, ojos color avellana, piel un poco bronceada, nariz recta y perfecta, labios un poco anchos y una dentadura perfecta, es obvio que con el ejercicio que hace tendría el cuerpo tan trabajado que tiene ahora y gracias a que es tan guapo... es de los más deseados aquí. Por suerte este se dio cuenta de que yo estoy aquí y paro de besarla.

-Nos vemos despues- le dijo Drake tocándole la barbilla y volteandome a ver con los ojos abiertos como platos.-¿¡Que es eso!?-Me grito mirando mis piernas.

-se llaman shorts-

-¡Esos son boxers de mujer!-

-Ya vamonos-

-No hasta que te cambies-

-De acuerdo-

Entre a mi habitación, cerré la puerta con seguro y salí por la ventana del segundo piso, el odia que yo haga eso pero yo también odio que me despierte de la forma en que lo hizo. Una vez en el piso comencé a caminar en dirección al entrenamiento.

-¡Lián!-Escuche que Drake me grita desde mi balcón haciéndome reír. Comencé a correr para llegar al entrenamiento antes que él porque sé que si me alcanza me llevará de regreso para cambiarme.

Una vez que llegue todos los hombres me miraron o más bien me examinaron de pies a cabeza una y otra vez y algunas chicas me miraron con odio, yo aquí no soy la que se acuesta con todos y que es la más odiada por las mujeres, pero según una lista que los hombres hicieron soy la más sexy aquí, aunque yo no lo creó asi y pienso que solo creen que lo soy porque nunca nadie me a gustado o eso creen, yo jamás me acostaría con nadie aqui y aunque sé que es muy cliché me gusta Drake, mi mejor amigo.