De regreso al mundo I

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Me sentí viva de nuevo. Y eso me aterra, pero es bueno. Me aterra porque estar viva significa sentimientos que no podré controlar, y es algo de mi querer controlar cada centímetro de lo que hago y siento, tal vez no solo de mi. Ayer lloré mirando una película, y me sentía desconcertada porque en medio de un sentimiento abrumador producto de la triste trama de la película, una sonrisa se escapaba de vez en cuando de mi rostro, incluso carcajadas. No suelo llorar, no lo hago frecuentemente, por lo que es común que tanto las demás personas como yo, al verme llorar, pensemos que ha de existir un motivo mas grande que el que se puede observar a simple vista. Pero no fue así, no esta vez, porque solo había un motivo: un personaje de una película que seguía un guión que tenía como objetivo cautivar y emocionar a los espectadores. Y me sentí viva, me sentí viva, mil veces y gritado al viento, me sentí viva. Y eso me gustó.

Por Debajo De La Piel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora