Puedo escribirte Enero mientras mi mente transita por el limbo de mis recuerdos; cuando la conocí por vez primera, como me entusiasmó recibir un mensaje suyo, sus primeras palabras y la terrible necesidad de querer oírla a cada instante.
Puedo escribirte Enero: calor, sudor, frío y el palpitar de este loco corazón mezclados en un torbellino de deseos absurdos por querer verla.
Enero... Si tan solo fueses diciembre y la magia de aquel instante pudiese repetirse: contarle mis secretos, ser parte de los suyos, permanecer despierto tan solo por no dejarla ni un momento y recibir resignado su "Hasta mañana" y esperar ansioso el día siguiente.
Enero... Cruel; me apartas hoy de ella porque lastimarla no debo más y su corazón ajeno al mío, indiferente a este y a su necesidad de amarla tan solo un minuto más.
Adiós Diciembre y venga Enero haciendo lejano el recuerdo de que la amé y pude haberla amado.
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Cartas a un cielo de Enero
RomanceLa libertad del corazón mío que priva de ese derecho a mis sentidos. El mundo no es más parte de mi existencia...