Narra Stacy
-Señorita Stacy su madre la llama, quiere verla en su despacho en media hora -dijo Susana detrás de la puerta.
-¡Voy! -grité.
Me levanté y fui corriendo al baño, me duché y me puse unos shorts blancos con un top azul marino y mis converse negras. Bajé corriendo las escaleras y me dirigí al despacho de mi madre, toqué tres veces hasta que escuché su apreciado "Adelante".
-Mamá, ¿querías verme? -pregunté.
-Sí, toma asiento.
Me senté, ella se quitó las gafas y me miró con pena.
-Mamá, ¿ocurre algo?
-Tú y tu hermano se irán 9 meses a Minnesota, tendrán alojamiento, servicio, autos...
-¡¿Cómo?! Está como a veinte horas de aquí, ¿por qué? -pregunté.
Minnesota está muy lejos de casa, además, para qué nos quiere allí.
-Kyle me pidió que les dejara estar unos meses fuera para ver si son capaces de vivir solos en otro estado -explicó.
-Osea, le haces caso al estúpido de Kyle que encima no tiene poder sobre nosotros... cuando lo vea lo voy a matar. Él lo único que quiere es que te libres de nosotros para que tenga espacio para... para... ¡Ya sabes para qué!
-¡Stacy! ¡No hables así de tu padrastro! Solo queremos tiempo para planear nuestra boda...
-¿Boda? ¡Qué mierdas! ¡¿Te vas a casar con el idiota ese?! No me lo puedo creer, has arruinado la felicidad de tus hijos por ese impresentable, porque sabes que a Jace también le cae mal, ¿no?
-Sí Stacy, sé que a Jace le cae mal Kyle, pero, ¿no has pensado en la felicidad de tu madre?
-Sí, he pensado en ella desde que papá se fue, por eso Jace y yo hacemos lo mejor para que estés feliz, pero... Casarse con un idiota que no tiene trabajo y encima quiere tener un hijo contigo para que parte de la herencia y de la empresa se las quede él, es inaudito.
-Stacy... Yo... -intentó decir algo hasta que la corté.
-"Stacy yo" qué, si quieres casarte con el idiota ese cásate, pero te puedes ir olvidando de tus hijos. ¿Cuándo nos vamos Jace y yo a Minnesota? -pregunté cortante.
-Mañana a las cinco, avisa a tu hermano, vayan a hacer las maletas -dijo fría
Subí a la habitación de Jace y toqué. Abrí la puerta y me encontré a mi hermano con una toalla en la cintura, madre mía, que bueno está.
-¿Qué miras idiota?
Y ahí ya lo jode todo, sí, Jace es muy guapo y todo lo que quiera, pero el carácter de estúpido que tiene lo hace ver un gilipollas.
-Haz las maletas, mañana, a las cinco de la mañana, nos vamos a Minnesota. Nosotros dos solos, mamá va a preparar su boda en los nueve meses que vamos a estar allí -expliqué.
-Espera... ¡Maletas, viaje, nosotros, solos, mamá, boda...! ¡Me estás jodiendo Stacy! ¡¿Se va a casar con el estúpido de Kyle?! -gritó. Creo que todos los vecinos le escucharon.
-No te estoy jodiendo Jace va a casar con Kyle.
Y con eso salí de su habitación dirigiéndome a la mía. Me senté en mi cama y me puse a pensar en todo lo que había pasado, ¿en serio quería irme y no volver a ver a mi madre y a su próximo marido? Sí, estaba dispuesta a marcharme y no volver a verla si se casaba con Kyle. Me agaché debajo de la cama y cogí mis maletas, me dirigí a mi armario y fui sacando toda mi ropa y metiéndola en las maletas. Cogí un pequeño neceser de viaje y metí mi cepillo de dientes, mi peine y mi colonia. Después cogí el neceser más grande y metí mi maquillaje.
-Susana, ¿se puede saber dónde están todos? -pregunté.
-El señorito Jace está en su cuarto haciendo las maletas y su madre se fue con Kyle a probarse los vestidos de novia -respondió.
-Gracias, iré a ayudar a Jace, seguro que estará hecho un lío.
-Vale señorita.
Subí las escaleras y me dirigí a la habitación de Jace, cuando entré toda su ropa estaba en el suelo y él estaba intentando doblar una camisa. Se me escapó la risa.
-¿De qué te ríes idiota?
-¿Necesitas ayuda hermanito? -le pregunté riéndome.
-Sabes que sí Stacy.
Jace es un año más grande que yo, el tiene dieciocho y yo diecisiete, ahora dirán, muy bien Stacy sabes que dieciocho menos uno es diecisiete. Estuve tres horas ayudando a Jace a ordenar sus maletas por lo que son las nueve de la noche, no habíamos comido nada desde esta mañana así que bajamos a la cocina a comer algo. Después de comernos un sándwich vegetal subimos a nuestras respectivas habitaciones a dormir.
Mañana será un largo día y esperaba no ver a mamá en toda la mañana.
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No te acerques a mí...
Teen Fiction-No te acerques más, soy la hija de la famosa empresaria de Estados Unidos -dije lo más segura posible. -¿De Jennifer Stephan? -preguntó asombrado. -Sí, te conviene no acercarte a más de 10 metros de mí si no quieres pasarte toda tu vida en la cárce...