Romanogers

segunda parte

El día transcurría lento, demasiado para cierta pelirroja que caminaba por el pasillo hacia su habitación, sintió su celular vibrar por lo que lo tomo al instante.
- hola.
- arañita- gritaron del otro lado de la linea.
- hola Stark que hice para merecer escuchar tu voz- mencionó con sarcasmo.
- lo se siempre es un placer escucharme- con ese comentario hizo irritar a la espía.
- porque me llamaste- dijo ya empezando a exasperarse.
- que genio- un bufido salio de los labios de la agente. - como decía ya que el capi no contesta mis llamadas, por cierto no vendría mal que le enseñes a usar ese aparato- dijo el hombre de ojos marrones.
- me llamas para decirme que Steve no puede usar un estúpido celular.
- no es por eso araña, es para comunicarles que haré una fiesta este sábado y todos están invitados. No pueden faltar.
- revisaré la agenda.
- entonces es un si- sin darle respuesta al terminar de escucharlo corto la llamada guardando su celular en la bolsa de su chaqueta.
Desvío su dirección buscando a sus compañeros, dedujo que el lugar mas predecible seria el comedor, al entrar pudo visualizar a todos cada uno pasando el poco tiempo libre que llegaban a tener en el día. Wanda y Sam se encontraban hablando en la mesa, visión miraba como el capitán y el general Rhodes se debatían en una competencia de ajedrez.
- tengo noticias- dijo llamando la atención de todos los presentes teniendo una mirada seria.
- son buenas o malas- pregunto Wanda levantándose de donde se encontraba.
- depende de como lo vean.
- nos dirás- interrumpió James. -Stark nos invito a una fiesta este sábado- la mayoría liberó un suspiro de alivio.
- nos asustaste creímos que era algo malo- grito Rhodes
- para ustedes eso es bueno- dijo levantando un ceja.
- iremos verdad- dijo con una sonrisa visión. Todos voltearon a ver al capitán su respuesta lo diría todo.
- claro porque no- dijo sabiendo que si decía que no, no dejarían de insistir.
- excelente, vamos visión hay que buscar que usaremos- con ese ultimo comentario Wanda tomo al androide del antebrazo y salieron por la puerta.
- yo iré a buscar algo no vaya ser que sea el único en ir en fachas- dijo James señalándose de pies a cabeza. Ni dos veces ya se encontraba a fuera
- mm y yo iré a ver que se compraran y de paso tal vez me compre algo- Sam salio tras Rhodes.
- y eso que no les diste un gran sermón enumerando cada una de las razones por las cuales no asistir.- su compañera lo volteo a ver con una sonrisa en el rostro.
- ya sabes como son de insistentes.
- eso es cierto, me dirás que llevaras esa ropa.
- que tiene de malo- vio su atuendo algo extrañado.
- todo, ven iremos de compras- tomo su mano dirigiéndose a la salida.
Ya estando en el estacionamiento le pidió que subiera al auto.
- iremos por ropa cierto- entro por la puerta del copiloto- no se porque no te gusta mi estilo.
- si y porque necesitamos integrar te en este siglo.
Llegaron al centro comercial donde entraron al primer quiosco de ropa. Al entrar se fueron directo a la sección masculina.
- toma prueba te esto- dijo tendiéndole un jean junto con una camisa azul marino formal.
- se tiene que ir con traje formal.
- no me dijo así que veremos trajes formales e informales, de paso hacemos un cambio en tu armario creo que lo pide a gritos- una sonrisa se formo en los labios del rubio antes de entrar al vestidor.
Natasha caminaba entre los pasillos de ropa buscando opciones para el capitán, se percató que 2 chicas se acercaban a ella murmurando cosas entre risas.
- hola- saludo una de ellas la cual era de cabello castaño y ojos color marrón.
- hola- contesto sin quitar la vista de las prendas frente a ella.
- podemos hacerte una pregunta- mencionó la otra chica de cabello negro y ojos azules.
- esa ya es una pregunta- dijo sin ánimos.
- solo queríamos saber si el joven que estaba contigo es tu hermano.
- el joven que entro a ese cubículo no es mi hermano..- no lo es, lo que pasa es que mi amiga quería pedirle su número de teléfono- la muchacha no la dejo que terminara de hablar, una sonrisa torcida salio de los labios de la espía.- lo que les iba a decir es que no es mi hermano porque el es mi novio
- ahh lo lamentamos, en ese caso no lo descuides- mencionó guiñando un ojo lo cual extraño a la agente al voltear se percato porque la reacción de la chica, Steve salió vistiendo lo que le dio, no lucia nada mal.
- lo haré, muchas gracias- se alejo acercándose al rubio que no entendía la razón por la cual natasha hablaba con el par de muchachas.
- no luces nada mal- lo miro de pies a cabeza con una sonrisa juguetona.
- quienes eran?- pregunto tratando de evadir el comentario de su amiga.
- solo querían saber si eras mi hermano- el soldado arqueo una ceja sin ocultar la confusión en su rostro.
- y que les dijiste?
- solo les dije que no eras mi hermano- levanto sus hombros en modo de desinterés.
- solo eso querían.
- no querían tu numero de teléfono pero les dije que eras mi novio, así que se alejaron sin decir más.
- no-vi-o- dijo sin poder ocultar sus nervios y el ligero rubor que empezaban a tomar sus mejillas.
- tan malo seria.
- no es eso nat, solo que no se si tu me llegaras a aceptar- el hombre de ojos azules siempre tuvo esa vaga idea de poder llagar a ser algo mas que amigos con la pelirroja pero el miedo a ser rechazado no lo deja avanzar, mas allá que el sentimiento de amistad que se tienen la cual teme perder si no llegara a funcionar pero para el eso seria casi imposible.
- porque piensas eso?
- no estoy seguro que hayas olvidado a Bruce del todo.

Después de esa conversación no volvieron a tocar el tema, pasaron por unos cuantos locales mas de ropa, Steve como buen caballero llevo todas las bolsas de ropa y de zapatos al baúl del auto.
Al regresar a la base sus compañeros se encontraban en la sala viendo una película.
- se tardaron mas que nosotros juntos- dijo Rhodes al percatarse que eran los dos compañeros que faltaban.
- digamos que elegir ropa para un hombre que vive en el pasado cuesta un poco mas de lo deseado- Steve se limitó a colocar las bolsas de compras en un extremo de la habitación.
- vendrán a ver la película- les comentó la castaña que se encontraba en uno de los sillones individuales.
- no- mencionaron ambos al mismo tiempo.
- si me buscan estaré en mi habitación- Steve salio de la sala dejando a sus compañeros algo extrañados.
- igual yo- la espía salio tras el, a sus compañeros les alegraba saber que su amiga al menos ya salia mas seguido de su habitación y llegaba mas seguido a los entrenamientos así que mejor siguieron viendo la televisión como si nada.

-Steve, puedes parar.
- que pasa nat?- volteo para poder quedar frente a ella
- quiero que sepas que nunca llegue a sentir amor por Bruce lo que sentí por el fue una simple atracción tal vez lo llegue a confundir con amor pero me di cuenta del error que cometí.
- cual es ese error-
- abrí mi corazón- el se limito a verla, en sus ojos se podía ver una mezcla de ternura y dolor.
- no debes cerrar tu corazón por un tropiezo nat, quizá hay alguien que te ama pero tiene miedo al rechazo.- la tomo de ambas manos sin dejar de verla, ella lo abrazo sabiendo que lo necesitaba mas que nada, con su mano le levantó la barbilla para poder ver lo que sus ojos reflejaban en ellos se podía ver el dolor algo que no le gusto.
- no puedo hacer feliz a nadie Steve- una lágrima rebelde logro salir la cual el limpio al instante.
- no digas eso, a mi me haces muy feliz nat- le dio un beso en la frente seguido de otro abrazo.
Estuvieron unos cuantos minutos mas así para luego separar se.
- descansa nat.
- descansa Steve.- con una última sonrisa se adentro a su habitación.
El se quedo observando la puerta un poco mas solo para grabar en su memoria lo que había pasado al igual que convencerse que no le pasara nada, mientras el viva y respire la protegerá con todo lo que puede dar.