Ríe, no todo es tan malo, después de llorar, te das cuenta de que hay que reír, reírse de uno mismo, de los kilos que te sobran, de tus malas notas, de lo que la gente piensa, hay que reír, ante todas las cosas, recordando que seguimos vivos y que la sonrisa es lo único que no nos pueden embargar, robar, suministrar, nada, la sonrisa es nuestra, nuestra risa hace que todo valla mejor, así que no lo dudes, llora lo que tengas que llorar, pero nunca te olvides de sonreír luego.
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Relato momentáneo...
Short StoryAlguna vez, todos tenemos un loco impulso de salir corriendo, huir a donde nadie nos encuentre. La cuestión es, ¿por qué no lo hacemos?, ¿qué es eso que nos limita? Tristemente la respuesta a esas preguntas, somos nosotros, limitándonos continuamen...