Tú...Mi agonía y Mi vivir

Capítulo 5

-¡Estuvo estupenda la película! ¿Viste toda la sangre?, ¡fue estupendo!- exclamé mirando a Leslie mientras salíamos de la sala del cine-

-Ahora no podré dormir...Gracias querida amiga, recuérdame ¿Por qué la vimos? - hizo una mueca de disgusto-

-La vimos porque... - pero una melodía muy familiar empezó a sonar por todo el lugar, y una vibración en mi bolsillo derecho me hizo captar que era mi teléfono el que sonaba- Aló ¿Con quién hablo? - atendí sin ver quién me llamaba-

-¿Tan rápido olvidas chaparra?- su voz, era él..., mi cuerpo se puso tenso y mis manos a temblar, sentía felicidad y a la misma vez enojo, le hice una señal a Leslie que ahorita volvía para poder atender la llamada en un lugar más privado-  ¿Hola sigues ahí?

-Adam...- dije lo más fría que pude mientras buscaba de nuevo el control de mi cuerpo ¿Cómo se atrevía a llamarme?, después de cómo me dejó-

-Pensé que habías colgado... ¿En donde estás? -¿estaba nervioso?-

-En el cine con Leslie, ¿Qué se te ofrece Adam? - quería matarlo, que descarado e infeliz, ¡Vamos Liz contrólate! me dije a mí misma-

-Quería verte pero creo que estás ocupada- respondió  ¿desanimado?- ¿No sé si puedas venir a la kermés de la escuela?

-Lo siento estoy con Leslie -no se como hacía para hablar porque mi corazón estaba latiendo a mil por hora, en cualquier momento saldría del pecho, estaba sudando hasta los pies, y todo por una simple llamada del chico que me tenía enamorada-

-¡Oh bueno! Adiós

Él había colgado y yo seguía con el teléfono pegado a mi oreja, Estaba en shock, estaba temblando y al mismo tiempo quería vomitar los nachos que hace unos minutos me había comido, mi cerebro aún no asimilaba lo que acababa de pasar... Quería llorar y matarlo a la misma vez, ¿De qué mierda iba hablar conmigo? Él me termino tres días antes del 14, se supone que si cortas es porque no quieres a la otra persona, ¿Entonces porque me llamo?

-Liz ¿Estás bien? -se puso frente a mí con cara preocupada-

-Oh... Si si claro -volví en sí y coloque mi teléfono de nuevo a mi bolsillo-

-¿Quién era?, pareces como si hubieras visto un fantasma

-Era Adam -la mire a los ojos, no podía permitirme llorar y menos al frente de mi mejor amiga, debía de ser fuerte-

-¡¿Qué?! -abrió sus ojos como platos- ¿Qué te dijo?
 
-suspire- Mujer no me siento bien,¿Podemos volver a la casa?  -dije con mis lágrimas asomándose por mis ojos-

-Esta bien -sonrío- sé que para ti es difícil hablar de este tema, aunque me digas que no, te conozco y sé que lo amas -toco mi hombro para darme fuerza lo cual solo funciono por un segundo-

-No sé qué haría sin ti -la abrace con tanta fuerza, estaba destrozada, me dolía ¿Cómo quería que me sintiera? Lo amaba tanto y la demostración estaba en que con una sola llamada pudo cambiar mi ánimo y cuando menos me di cuenta ya estaba llorando en el hombre de mi amiga-

-Ay Liz -me abrazo más fuerte- Ven, vamos a casa

-Me separé y limpie mis lágrimas- Gracias -logre pronunciar con dificultad-

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¡Hola lectores!
Espero que estén bien, bueno chicos quería pedirles una gran disculpa por tardar en actualizar, he tenido bastantes piedras en mi camino y bueno estuve tratando de quitarlas pero ya estoy acá y una gran lectora me dio una gran idea en hacer una maratón, ¿Qué les parece? ¿les gusta la idea? Bueno si es así déjenmelo saber con un comentario o un voto, espero les haya gustado el capítulo, saludos y Dios los bendiga.