Una loca historia de amor - Banghim

Capítulo 5

Uno de los momentos favoritos de Yongguk era el regreso a casa. Caminar tranquilamente escuchando las tonterías y media que salían de la boca de Himchan, disfrutaba mucho pasar tiempo con su amigo, sin nadie que los interrumpiera. Pero justo en ese momento, Yongguk no estaba nada feliz. No es que el chico castaño le desagradara, simplemente no le caía muy en gracia ver lo "bien" que Youngjae y Himchan se llevaban. Maldecía mentalmente a Daehyun por lograr juntar a esos dos.

Pelinegro y castaño, ajenos a Guk, reían al recordar la cara que minutos antes había puesto Daehyun al verlos salir de la universidad juntos. De tras de ellos, Guk veía la escena afligido. ¿Cómo podría recuperar a su amigo? Se preguntaba, pero a la vez, se reprendía por querer acaparar la atención de Channie. Después de todo ellos solo eran amigos y nada más.

- Hey, Guk. ¿Qué haces ahí? Anda, hay que ir a casa

- ¿Y Youngjae?

- El tomo otro camino a su casa, quiso despedirse, pero parecías ido. ¿Te sientes bien?

Esos pequeños detalles, eran los que enamoraban cada día más al moreno. El tacto en su frente, mientras era observado por esas orbes oscuras con sincera preocupación, derrumbaban poco a poco la pared de resignación, que había construido alrededor de su corazón. Llenándolo de falsas esperanzas, que terminaban lastimándolo más.

- Estoy bien, Channie – sabía que la gente le creería tonto al verlo sonreír tan exageradamente, pero era algo inevitable para él

- Ok, no estoy muy convencido, ahora mismo estas poniendo una cara de estúpido. Anda, mejor vamos a mi casa.

- ¿A tu casa? ¿Para que?

- Mi casa queda mas cerca, descansas un rato y luego te vas a la tuya.

El camino hacia la casa de Himchan fue muy tranquilo. Demasiado para Yongguk, que solo esperaba que los sonidos que su corazón estaba haciendo no fueran escuchados por el pelinegro. Tenía tiempo que no iba a casa de Chan y estaba realmente nervioso y ansioso.

- Ya llegue – grito Himchan una vez que cruzo el umbral de la casa

- Bienvenido hijo. Ahhhh Gukkie, que sorpresa verte – saludo amablemente la madre de Himchan

- Buenas tardes, señora Kim

- Si, si, hola a todos. Estaremos en mi cuarto mamá

- Crie un hijo tan maleducado – suspiraba la señora Kim, observando a los dos chicos subiendo las escaleras.

El cuarto de Himchan seguía igual, parecía que el tiempo no había pasado en ese lugar. De niños, pasaban horas jugando en ese mismo cuarto, algunas veces hasta se quedaba a dormir.

- No te quedes ahí parado, pasa y siéntate en la cama

De pronto la ansiedad se intensifico. Recordó por qué había estado evitando visitar a su amigo, no quería quedarse solo con él y perder el control.

- Guk, Guk... Yongguk

- ¿Qué?

- Eso debería preguntar yo, ¿qué diablo te pasa? Estas más ido que de costumbre. ¿Acaso Yongnam volvió a darte algo raro? Ya te dije que no aceptes nada que venga de él, aunque sea tu hermano. Mariguana, coca, la última vez fueron hongos alucinógenos.

- No, es eso, jejejeje – por más que intentaba parecer normal, más nervioso se ponía.

- Ah, ya se. Te quedaste escribiendo hasta tarde de nuevo. Aunque ahora no tienes cara de zombie. Ya sé que te gusta eso de escribir canciones, pero tu tiendes a exagerar y no dormir en días. En verdad eres una amigo muy problemático.