PARTE 1 Harry García

14 2 0
                                    

Tom, Harry García y yo acabamos de salir del edificio del ascensor grande y ahora vamos al aeropuerto para volver a casa, hacer las maletas e irnos. Pero yo no quiero que eso pase, yo no quiero irme sin Tom, y Tom no quiere irse sin mí.

¿Tan difícil es?

Parece ser que sí.

- Vamos Tom.- le dice Harry García a Tom ecada vez que se queda mirando los escaparates de las tiendas.

A mi no me tiene que meter prisa, yo ya no me entretengo con escaparates. Hay cosas mejores que un puñado de duces o de juguetes.

El aeropuerto es igua que esta mañana. Aún no me creo que hayamos venido hasta Londres solo para estar unas oras. No tiene sentido, es una perdida de tiempo. Pero ahora puedo decir que he estado en Londres, cosa que muchos no pueden. Pero esto tampoco importa ya.

Harry García nos lleva hasta una cola de gente para entrar en e avión.

Los aeropuertos son una pasada, están llenos de gente que va y viene, y que cuando sin querer te dan un empujón no te piden perdón.

Mamá decía que pedri perdón, dar las gracias y saludar a la gente era lo más importante del mundo, pero papá siempre se reía de ello, decía que había cosas más importantes que ser educado.

Yo creo que ser educado no es solo importante, sino valioso.

- Harrry Gracía, ¿cuanto vamos a tener que esperar? La gente es muy lenta- Tom se está quejando todo el santo rato y le mira con cara triste haciendole pucheritos para que valla más rapido, pero Harry Gracía no puede hacer nada.

- Lo siento Tom, no puedo hacer nada.- dice el cansado.

- Pet, yo creo que este tío es un espía.- me dice a lo bajines.

- Tom, ¡como va a ser un espía!- Harry Gracía se gira para mirarnos cuando grito eso y enarca las cejas, luego se vueve a dar la media vuelta.

- Que sí, que es un espía.- insiste el.

- Que no Tom, Harry García no es un espía.-

Rápidamente Harry Gracía se gira y nos mira como si acabasemos de hacer algo malo.

- ¿He oido mi nombre?- pregunta pasando su mirada por la nuestra.

- No señor.- dice Tom.

- ¿Entonces tengo alucinaciones?- pregunta irónicamente. Me mira a mi, y yo no me muevo ni un pelo, luego mira a Tom, y este con total naturalidad asiente.

- No lo creo Tom, no.- Tom no aguanta la risa y se echa a reir a carcajadas.

- Vera, Harry García, Tom cree que es usted un espía.- le explico mientras Tom sigue partiendose de risa.

- Un espía...- repite el. Yo asiento.

- Es un chico muy listo tu tío.- me mira sonríe y se da la media vueta esperando que la gente se mueva de una vez y podamos coger el avión.

No lo entiendo, ¿Muy listo? Eso solo quería decir una cosa; que Harry García era un espía.

Pero por esa sonrisa que me a dedicado despues de decirlo, esa sonrisa jugetona y peliaguda a la vez... no se que pensar, tal vez sería una broma, o simplemente un sarcasmo.

Por fin la gente se mueve y no se muy bien como acabamos sentados en e avión.

Yo estoy en la ventana, a mi lado esta Tom, y luego Harry García.

Las azafatas empiezan a decir cosas, pero yo ya las se, por que a la mañana e estado aquí.

- Harry Gracía, ¿puedo dormir?- pregunta Tom entusiasmado.

Hoy hace más calor que ayer pero menos frío que mañana.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora