Creepypasta

La curiosidad mató al gato...

Estabamos alli sentados los tres: Sol, Luna y Yo. Pensando que hacer aquel dia de verano. Si ir a bañarnos a un rio o caminar como cualquier otro dia.

En eso algo pasa por mi cabeza,un recuerdo pero como si no hubiera pasado de verdad, decidí ignorarlo como si no hubiese pensado en eso.

Final mente desidimos ir a caminar, despues de caminar dos kilometros aproximadamente vi algo algo como...

Yo: ¡ey!

Luna y sol miraron y rieron al mismo tiempo, a nuestro lado habia un almacen aparentemente abandonado.

Yo: ya hemos estado aqui.

Sol: Nose. Lo hicimos?

Luna: no se de que hablan, aparte este lugar da mucho miedo.

En eso empiezo a recordar que algo habia pasado alli, no se bien que, pero nada bueno.

Sol: Y si...

Luna: yo no entrare allí

Sol: Por queee? No me digas que te da miedo!

Despues de diez minutos logramos convenserla y nos asercamos a ese almacen aparente mente abandonado.

Despues de pasar entre yuyos y varias plantas logramos llegar a la puerta del lugar, pero estaba cerrada. Despues de dar vueltas al almacen desidimos forzar una puerta con un fierro que yo habia encontrado.

Despues de cinco minutos de forsarla los tres logramos que sediera, habia un olor putrefacto y un frio de cagarce ademas de que paresia no pasar un rallo de luz.

Luna: ni de chiste entrare allí.

Yo: vamos tengo mi celular para alumbrar.

Sol: es verdad aparte no te pasara nada... Creo.

Desidimos entrar y mientras avanzamos la visibilidad se tornaba mas compleja. En eso se escucha una risita como de una niña pequeña y todos quedamos tiesos en el lugar

Yo: que fue eso, carajo!

Sol: paresiera ser una niña...

Luna: yo quiero irme.

Yo: pues lo tendras que hacer sola, nosotros seguiremos.

Sin pensarlo siguió caminando a nuestro lado sin que nadie viera casi nada.

De repente me detengo porque me pareció haber visto algo, y entre la oscuridad sale una niña que nos miraba con una sonrisa siniestra.

Desido hablar:"qu...qu...que haces aqui?". Me mira y me dice con una vos rasposa:"solo quiero jugar". En eso Sol me toma de la mano y me dise al oido vamonos por favor... Y yo respondo con un si.

Yo: ¡corran!

Y los tre salimos corriendo intentando no perdernos en la densa oscuridad que había en ese lugar. Logro salir con Sol, pero...
faltaba Luna.

Los dos nos miramos sabiendo que ninguno queria volver pero debiamos hacerlo.

Yo: debemos volver.

Sol: si lose.

De repente se escucha:"vengan a jugar con nosotras". Otra vez la tierna vos de la niña.