Mi habitación empezó a iluminarse a causa de los pequeños fragmentos de luz que ingresaban desde mi ventana hasta llegar a mi cara impidiéndome dormir, hoy es el día en el que capas encuentre a la persona que tanto me gustaría hacerla sufrir, si soy mala pero me trato mal de alguna manera se lo merece. Hoy hay clases eso solo significa una cosa comienza el infierno.
Me levante de mi cama no sin antes darle un saludo al suelo con mi cara. Lindo comienzo ¿No creen? En fin, fui al baño para poder darme un buen baño relajante es obvio no sin buena música.
Salí de allí para poder ir a cambiarme, me puse un vestido que compre con Dylan por cierto él lo eligió llegaba un poco más arriba de la rodilla, junto a unos lindos zapatos rojos, deje mi pelo undulado al natural y baje con mi bolso para desayunar como todos los días.
-¿Dy? – Busque por la cocina, el balcón, la oficina hasta llegar a su habitación – Dylan ¿Estás ahí? – toque la puerta repentinas veces pero no obtuve respuesta alguna – ¿Dónde carajos te metiste? – susurre entonces decidí llamarlo.
*Marcando... deje su mensaje en el buzón de * corte, tampoco me contestaba ¡Diablos!
Escuche la puerta abrirse y cerrarse fui corriendo bajando las escaleras tratando de no caerme ya que soy bastante torpe. Vi a Dylan entrar por la puerta de la sala con una enorme canasta con cosas en ella y esas cosas son comestibles.
-¿Se puede saber dónde rayos estabas? – Me miro con una sonrisa cómplice como si hubiera robado algo o echo algo malo – Dylan no me digas que robaste esa canas...
- Oh Brooks no he hecho nada malo solo... bueno tal vez hice algo pero no es malo... oh mejor dicho n...
-¡Por dios Dy solo dime! – grite desesperada
-Estaba con la vecina – observe sus ojos llenos de ¿Alegría? –No me mires así hermanis no le hice nada tiene esposo.
-Bien, pero quiero desayunar y sin mi cocinero no podre anda, desayunemos que se nos hace tarde – no le pregunte más cosas sobe lo que paso no me importaba mucho de hecho.
Llegamos al instituto y Dylan dejo el auto en el estacionamiento al bajar sentí muchas miradas demasiadas en realidad, era comprensibles.
Espero que este año sea uno de eso inolvidable que ocurre algo y lo marca de forma incomparable a los demás, yo tuve uno de esos años incomparables e inolvidables pero no en forma buena, estos últimos años no han sido los mejores pero sin embargo uno simplemente tiene que dejar de lado las cosas que suceden y seguir adelante sin más, sin esperar que te pasen cosas buenas o malas sino estar preparado a lo que ocurra. Aunque no creo a mí y a Dylan nos pasen cosas peores a las que hemos pasado.
Entramos al Instituto ya que habían tocado el timbre hace unos segundos, estuvimos buscando la clase por varios minutos. Hoy tendríamos nuestra primera reprimenda por llegar tarde, claro no me molesta.
-Señor y señorita ¿Evans? ¿Buscan sus aulas? – Asentimos ante la pregunta del director Jenkins – Acompáñenme por favor, ¿Qué tienen ahora?
- Química Dire – dijo Dylan mientras lo seguíamos silenciosamente.
- Muy bien – seguimos caminando junto al director hasta parar frente a una puerta entre abierta.
Nos introdujimos en ella, todos de inmediato se callaron y nos miraban sonrientes hasta confusos.
-Oh Carlos, adelante – dijo la profesora cuyo nombre aún no se – ¿Estos niños están molestando? No se preocupe no volverá a pasar ahora chicos a sentarse ahora mismo – ordeno la Profesora, obvio que nosotros hicimos caso omiso a lo que dijo y fuimos a sentarnos en los asientos de atrás.
ESTÁS LEYENDO
Eligiendo al Enemigo
Teen FictionLe coloque el paño frió para que la fiebre cesara en su frente mientras el parecía ya dormido. Aproveche el momento ya que había hecho mi trabajo así que decidí irme para mi departamento. -¿Brooks? espera emm... ¿Puedes quedarte conmigo esta noche...