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Conociendo

JiYeon

Cuando llegamos a la cocina, MyungSoo sirvió un vaso de agua para cada uno. Le sonreí cuando me entregó el vaso y tomé varios tragos.

-Gracias- Dijo Amber sonriendo.

-No creí que las cosas se pusieran así- Dijo MyungSoo mirando a la nada- No pensé que Jimin se pondría así, ¿Saben? Él, normalmente, es calmado. Sí, es un imbécil, no escucha y le agarran pequeños enojos muy seguido. Pero es una buena persona... Como su mellizo puedo sentir su angustia.- Finalizó dándole un trago a su vaso.

-Jeongguk... Él, quizás, no tenga tanta razón para ponerse así pero... Él sufrió mucho. Yo era pequeña cuando mamá murió y nació JiYeon, pero todavía recuerdo las noches en las que Jeongguk lloraba muy fuerte. Siempre me decía que amaba a nuestra madre y que la quería de vuelta... Por eso nosotras lo cuidamos mucho.-Dijo Amber sonriendo.

-Jimin era el más cercano a nuestro padre... Por eso, cuando se separaron, él se sintió como atacado. Mamá no lo dejó quedarse en Busan y lo trajo a rastras hasta Deagu. Nosotros no nos sentimos bien con esto, pero Jimin... Él odió a nuestra madre luego de eso. Todavía no la perdonó.-Dijo.- Pero hay que verle el lado bueno a esto... Podremos conocernos mejor. Me gustaría volverme cercano a ustedes, chicas.- Acotó sonriendonos.

-¡A nosotras también nos gustaría!- Dije animadamente mientras le sonreía a Amber. JungKook entró a la cocina y se sentó entre Amber y MyungSoo.- ¿A quién llamaste?- Le pregunté

-A un amigo.- Respondió.- ¿Qué pasa con los otros? ¿Jimin y JinRi?- Preguntó.

-Jimin se enojó, gritó y se fue a su habitación. JinRi fue para calmarlo.- Contestó MyungSoo.- Tú... Podrías... ¿Puedes ir a hablar con él? Creo que le hará bien que hables con él. Pienso que pueden ser buenos amigos-  Dijo MyungSoo un poco nervioso. Pude ver que JungKook lo miraba con el ceño fruncido- Escucha, soy el mellizo de Jimin, sé que él necesita hablar con alguien que no sea de su familia y... Creo que los dos pueden sacar provecho de esto- Mi hermano asintió mientras agarraba dos vasos de agua.- Es la segunda puerta a la derecha... Tiene carteles pegados en ella, te darás cuenta cuál es... Y JungKook, gracias.- Luego de eso, Kook desapareció por las escaleras.

-¿Estas seguro que sacaran algo bueno de esto? JungKook no tiene tan buen temperamento con las personas que no conoce, y Jimin... Es tu hermano, tú sabes como es él.- Dijo Amber rascando su nuca.

-Estoy seguro que podremos sacar provecho de esta situación... Ahora, ¿Porqué no me hablan de ustedes? Si van a ser mis hermanastras quiero conocerlas bien.- Dijo sonriéndonos. Definitivamente, MyungSoo me caía mejor que antes.

Jeongguk

Subí las escaleras con cuidado de que no se me cayera ninguna gota de agua de los vasos. Al llegar a la puerta de la habitación de Jimin di unos suaves golpes. Abrí la puerta lentamente y pude ver al chico acostado en la que, supuse, era su cama, y a su hermana sentada en la cama de al lado.

-Yo... Vengo a hablar con Jimin... Digo, solo si puedo.- Tenía los nervios por las nubes. Los hermanos se miraron entre sí y pude ver como Jimin suspiraba y asentía. JinRi pasó por mi lado y me sonrió cerrando la puerta tras ella. Me acerqué a Jimin y le extendí el vaso con agua.

-Gracias- Dijo agarrándolo y dando unos tragos.

-De nada...-Dije un poco incómodo mientras me sentaba donde antes estaba JinRi.- Sabes, tú... Ya sé que no nos conocemos pero... Puedes contarme lo que quieras. Me dijeron que te pusiste un poco mal luego de que yo me fui y... Creo que los dos sufrimos bastante, así que no debes tener vergüenza.- Le dije de la manera más cálida que pude. No podía creer que le estaba hablando así a Jimin, ya que éramos prácticamente desconocidos. Pero debía tratarlo bien, él la pasó tan mal como yo. Ademas de que TaeHyung me dijo que lo tratara con delicadeza.

-No debes tratarme así si te sientes incómodo... Sé como eres, Jeon Jeongguk... Tú no sabes como soy yo, no sabes lo que sufrí. No tienes derecho a tenerme compasión.- Me dijo de una manera bastante ruda. Sentí una rabia crecer dentro de mí, y junto a ella las ganas de plantarle un puñetazo en la cara a Jimin.

-Tú tampoco sabes lo que yo sufrí, así que también puedes cerrar un poco la boca.- Dije mirándolo seriamente. Él suspiró y se recostó nuevamente.

-Sabes... Yo todavía no perdono a mi madre por arrancarme la vida de las manos.- Jugó con el vaso en su mano y suspiró- Amaba Busan, amaba a mis amigos, amaba mi vida allí. Y de un día para el otro, ellos se separaron. Mamá quedó con la custodia y nos arrastró a los tres hasta Daegu. Me sentí personalmente atacado. Solo pensó en ella y en su futuro cuando lo hizo. Nunca nos preguntó nada.- Me miró a los ojos- A mis hermanos no les importó nada de eso porque ellos no sufrieron tanto y... Yo siempre fui el que sufrió más de los tres, ellos lo saben.- Se sentó en la cama mirándome y sonrió- Extraño mucho a mi padre, pero si lo llamo... Tengo miedo de comenzar a decir lo mucho que extraño mi antigua vida y... Hacerlo sentir mal... Él vendrá este fin de semana a vernos, cenaremos con él y creo que... Quiero hablar con él sobre todo esto.- Finalizó.- ¿Y tú qué? ¿Tus padres también se divorciaron?-Preguntó. Yo sonreí mirando al suelo y negué con la cabeza.

-Hubo complicaciones en el parto de JiYeon y ella no pudo soportarlo.- Jimin me miró arrepentido, a lo que yo sonreí para calmarlo- No soy cercano a mi padre... Él no supo cuidarme cuando mi madre murió. No lo culpo mucho, tenia una hija pequeña a la cual debía ayudar a seguir adelante, una recién nacida y debía pasar el dolor de la muerte de mi madre pero... ¿Dónde quedé yo ahí? Él jamás se fijó si yo estaba bien o no, si necesitaba algo o no... A él jamás le importó nada mío hasta que comencé a crecer y se dio cuenta que tenia un hijo que necesitaba cariño, pero para ese momento ya era demasiado tarde... Él me perdió y le costará recuperarme.- Finalicé para luego terminar mi vaso de agua.

-Admiro tu fuerza. Yo no podría vivir si uno de mis padres muriera.- Me dijo un poco dolido.

-Era pequeño, no recuerdo nada pero... Todavía la extraño y el vacío siempre estará ahí.- Dije sonriendo.

-¿Puedo contarte algo?- Me preguntó. Yo asentí sonriendo.- Me gusta JiYeon, tu hermana, desde hace 2 años o más. Nunca me sentí lo suficientemente preparado como para declararme. Hace un mes decidí que lo haría, así que comencé a acercarme a ella, a sonreírle en los pasillo y verla en el almuerzo... Y ahora nuestros padres vienen con esto... No me siento bien con ella siendo mi hermanastra. Yo la quiero y no como una hermana.- Con cada cosa que decía yo sonreía.

-Lo entiendo... JiYeon es muy bonita, es parecida a mi mamá.- Le sonreí a lo que él hizo lo mismo.- No pierdas las esperanzas, si se tiene que dar, se dará.- Dije con una sonrisa plasmada en mi cara. Jimin se acercó a mi sonriendo y me abrazó.

-Ya te siento como un hermano... Recuerda, esto se queda aquí.- Dijo golpeando levemente mi hombro. Yo asentí y sonreí. Él sería un gran hermano para mi.

↠Los Park-Jeon↞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora