Viviendo con una estrella de rock. (TERMINADA)

Ron

Despierto por unas risas provenientes de la cocina. Aún es de noche, y el reloj de la pared indica las 4:36AM. Me levanto del suelo, dándome cuenta que Kurt no está. Me acerco a la cocina, y por el umbral veo a Kurt y a Axl con una botella de ron blanco. Están sentados cada uno de un lado de la mesa, y ninguno de los dos trae camisa. De pronto los dos me miran.
-¿Qué hacen bebiendo a estas horas... Y semidesnudos?- Digo confundida.
-No estamos bebiendo.- Dice Kurt arrastrando las palabras.
-Kurt, no soy estúpida. Tienen dos botellas de ron ahí.-
-Anda, no seas aguafiestas, ven a beber.- Dice Axl.
-No. Mañana tenemos muchas cosas que hacer, y Kurt necesita dormir.-
-Anda bebe, hay mucho aún.- Les ruedo los ojos a los dos, y me acerco.
Ayudo a Kurt a levantarse de su asiento, y se aferra a mí como si fuera un koala. Con trabajo lo llevo hasta el cuarto de Axl, y lo acuesto de un lado de la cama. Después regreso a la cocina por Axl, pero está acostado en el suelo, abrazando las patas de la mesa y quejándose cuando trato de levantarlo.
-Axl, no hagas las cosas más difíciles, levántate.-
-No.- Dice haciendo pucheros.
Un poco frustrada, me voy y llego a la habitación de Duff. Con un poco de vergüenza, entro y lo encuentro dormido, también sin camisa. Jamás entenderé esa costumbre de los hombres. Lo sacudo un poco hasta que abre los ojos, cuando me ve, se acomoda en la cama.
-¿Estás bien?- Dice frotándose los ojos.
-Si, Duff perdón por levantarte, necesito ayuda con Axl... Está en la cocina.-
-Te sigo.- Dice levantándose.
Caminamos a la cocina, donde Axl sigue en la misma posición, pero ahora está riéndose como loco, sin ninguna razón.
-Necesito llevarlo a su cama.-
-Yo me encargo.-
Duff se agacha, y con fuerza carga a Axl como si fuera un bebé. Me río como loca, y los sigo hasta su habitación.
-¿Quieres que lo deje ahí?- Dice mirando el cuerpo de Kurt.
-Si, es mi venganza por interrumpir mi sueño.-
-Uff, los dos te van a amar mañana que se vean en la misma cama.- Dice sarcástico.
Duff apaga la luz del cuarto de Axl y los dos salimos.
-Supongo que gracias, perdón por despertarte.-
-No te preocupes.- Sonríe comprensivo, y yo regreso a mis cobijas en el suelo. Pasan varios minutos, pero mi sueño se ha ido por completo. Me levanto y me siento al lado de la ventana del edificio. Hay pocos coches pasando.
-¿Ana?- Escucho la voz de Duff. Me volteo.
-¿si?-
-No puedo dormir, ¿por qué no vamos a dar un paseo?- Volteo a ver el reloj.
-Duff, son las 4:57, no hay nada abierto.-
-No se necesitan lugares abiertos para ir a dar un paseo.-
-Agh, está bien.-
Me levanto del suelo y me pongo mis zapatos. Duff sigue sin camisa, y toma unas llaves. Después, salimos juntos del edificio y nos metemos a una camioneta azul.
-¿Me vas a secuestrar?-
-Probablemente, pero dejémoslo en suspenso.-
Pasamos el resto del camino en silencio, y a decir verdad, me pone un poco nerviosa. Se estaciona frente a un edificio que parece que se está cayendo. Entramos y bajamos un piso, por un momento pienso que en serio me va a secuestrar, hasta que llegamos a un "boliche" lleno de hombres viejos alcoholizados. Nos sentamos en una mesita.
-Perdón por no poder pagar una línea, es mentira eso de que las estrellas se pudren en dinero.-
-Está bien pero, ¿Qué hacemos aquí?-
-Necesito que me cuentes la verdad, y con muchos detalles.-
-Ya te la dije, la verdad es esa. Sé que es difícil de creer, pero es en serio.-
-Y dime otra cosa... ¿Tú y Kurt son algo?- Se que me sonrojo.
-¿Qué? Bueno, yo... No lo sé. Supongo que, no oficialmente, yo... En serio no lo sé.-
-Bueno, nos caes mejor que Courtney.-
-Oye, recuerda que hay dos Kurts, en algún lado del mundo hay un Kurt con una Courtney, y yo tengo a mi Kurt.-
-Bueno, ahora sí cuéntame la verdad. Sin mentiras, con detalles.-
Y a pesar de que el tema me agobia, paso horas, y horas, contándole como empezó todo. Me impresiona de vez en cuando soltar pensamientos sobre el tema, que ni siquiera a Kurt le diría...

*Narra Kurt*
Me despierto por unos ronquidos que definitivamente no son ni de Ana, ni de Krist, ni de Dave... Me empiezo a alterar cuando veo que estoy en una cama, y literalmente brinco contra al suelo al darme cuenta que estoy con Axl. El ruido lo despierta, obviamente.
-¿Qué chingados estás haciendo en mi cama?-
-No seas cabrón, no lo sé.-
Sin si quiera mirarlo salgo a la cocina, donde encuentro mi camiseta en el piso, y me la pongo de inmediato. Agh, tomé demasiado ayer con este tipo. Después voy a la sala, donde Krist está dormido, y Dave está comiendo papitas con Steven. Ana no está.
-¿Dónde está Ana?-
-¡Buenos días Rubio precioso!- Dice Dave.
-Oye, me duele la cabeza. No grites. ¿Dónde está?-
-No tengo idea. Pero espera, ¿saliste del cuarto de Axl?- Los dos ríen como niños pequeños.
-Imbéciles.-
Me siento en el sillón dónde está dormido Krist, y con un plumón que hay en la mesita de la sala, le dibujo una guitarra matando un bajo. Después de un largo rato, en la sala estamos reunidos todos. Menos Duff y Ana.
-¿Dónde está Duff?- Dice la molesta voz de Axl.
-No deberé tardar, suele venir aquí para dormir a las dos de la tarde, y ya son las tres.-
Me molesta la idea de que estén juntos, aún que es lo más probable, y más me enfurece no sabes en dónde está Ana.
-¿No sabes dónde chingados están?- Le suelto a Axl.
-¿Tienes miedo de que el bombón te esté engañando?-
En eso, la estúpida puerta se abre. Y efectivamente, vienen Ana y Duff riéndose como locos, y me frustra aún más que Duff ni trae camisa. Ana cambia totalmente su gesto cuando me ve, y se va cabizbaja a la cocina. Duff se sienta a mi lado.
-En serio, esa niña está muy, muy enamorada de ti. No la dejes ir Cobain.-
-¿Dónde chingados estaban?-
-En el mejor motel de Nueva York.- Cuando ve que estoy dispuesto a lanzarme contra el, vuelve a hablar.
-Relájate, en serio, ella no te cambiaría por nadie. Fuimos a cenar a un restaurante.-
-Son las tres, ¿fueron a cenar?-
-Salimos a la casa a las cinco, cuando los llevamos a la habitación de Axl.-
-Ya basta Duff.- Puedo no soportar nada a estos tipos, pero no quiero tener problemas con Ana.
Me levanto del sillón y voy a la cocina, donde la encuentro tomando jugo de manzana. Se lo quito de las manos, y lo aviento al lavabo.
-Vámonos de aquí.- Digo mirando sus profundos ojos.
-No tenemos a donde más ir...-
-No, vamos a dar un paseo, por favor.-
-Kurt acabo de regresar y tengo demasiado sueño...-
-Por favor, tengo algo importante que decirte.- Me mira esperanzada.

Hola, ya sé que este capítulo está muy aburrido, prometo que tengo ideas buenas para los siguientes. No olviden comentar mucho por favor. Gracias por leer.❤️