- Tócalo. Vamos... - le rogó él. Con la voz ronca, _____________ cedió y acarició la punta de aquella erección. Jamás había hecho esto en su vida, siempre le había parecido desagradable, pero con él...todo había cambiado. Primero lo acarició suave, escuchando los leves gemidos roncos que Justin soltaba. – Dios mío nena...quiero hacértelo... - le volvió a comer la boca, mezclando su deliciosa y húmeda lengua con la de ________________.
- Hazlo... Y esa fue la última palabra que hizo que Justin no se lo pensara dos veces. La cogió de los muslos y la cargó, haciendo que____________ entrelazara sus piernas tras su espalda. La toalla quedó subida hasta el último punto de sus muslos. Justin la cargó hasta el diván, para luego acostarla sobre él. ______________ lo miró desde abajo, sus ojos fueron a parar en la erección de ese hombretan estupendamente salvaje que le ponía tanto. Él no dudo en bajarse los pantalones y el bóxer, sin previo aviso, los ojos de _______________ se nublaron por un momento, estaba viendo demasiado, empezaba a mojarse, sentía la esa fina humedad en su sexo. Él estaba en frente suyo, completamente desnudo. Le parecía un sueño. Era perfecto. En cada rasgo. Cada centímetro. Cada parte de su cuerpo, incluyendo su gigantesco pe.ne. Ahora sí estaba mojada. Lo necesitaba dentro de ella, moviéndose en su cuerpo, llenándola con esa enorme po.lla... - Fóllame duro Justin, duro. – él se inclinó sobre su cuerpo, se sostuvo de los codos para no aplastarla, aunque tampoco aguantaría mucho. Las palabras de _______________ tenían su miembro más erecto que nunca. Solo bastaba un solo jo.dido contacto y derramaría todo su líquido sobre sus piernas. - Eso haré nena... - le afirmó él. Bajó la cabeza para quitarle el pequeño nudo a la toalla que _______________ tenía, con los dientes. La abrió, un lado a la izquierda y otro a la derecha. De pronto tenía el cuerpo de ___________ desnudo frente al suyo, empezó a agitarse, jadeante, volvió a inclinarse para besarle los senos, abriendo su boca y comiéndose ese delicioso caramelo, para luego morderlo con delicadeza. - Ah... - gimió ella. Se estremeció por completo. – Mnh... -volvió a decir. Se movió de pies a cabeza. Justin volvió a morderle un pecho. – oh, si...sigue... - Voy a hacerte esto y mucho más preciosa...- Dímelo... - le rogó ella, antes de que él pudiera inclinarse para saciarla mucho más. - dime lo que me harás... - Te sorprenderías... - Quiero escucharlo. – susurró ella. Justin sonrió. Que buen sexo tendría esa noche. Con su mejor amiga. Jo.der, lo disfrutarían al máximo. - Abre las piernas. – le ordenó. ________________ lo hizo, mientras él posicionaba su pe.ne en la entrada a su sexo, lo rozó suavemente por sus labios vaginales, sintiendo que _____________ le apretaba la espalda, deseosa por tener adentro de una vez. - ¿quieres saber lo que te haré muñeca? - Sí... - dijo ella, exhausta. Quería escuchar palabras eróticas de la boca de Justin. Que la excitara más, aunque no estaba segura si podría estarlo más. - Te voy a follar preciosa, te la voy a meter tanto... tan dentro que vas a gritar... - Justin tomó impulso, su miembro entró con fuerza al sexo de ________________, esta entreabrió los labios y soltó un respiro. – y vas a pedirme más y más , hasta que tu coñose acostumbre a mí...a mí y a lo que te voy a dar...