Prólogo

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Ellington
«—Bueno, yo, uh... ¡Ell y yo tendremos un bebé! exclamó Rydel, acercándose más a mi. Creo que estaba algo nerviosa.

Todos permanecieron en silencio. Riker nos observaba con los ojos más abiertos de lo normal y su boca entre abierta. Parecía que apenas le hubiesen dicho que el cuento de la cigüeña no es real, y que existe algo llamado ''sexo'', y que es así es como realmente nacen los bebés. Sí, claro; como si el aún fuese virgen.

—¡Voy a ser abuela! —chilló Stormie con mucho entusiasmo, abrazando con fuerza a Mark, que estaba parado a su lado, sonriendo.

Riker negó ligeramente con la cabeza antes de poner su mejor sonrisa para su madre y para su "hermanita bebé".

—Preparé la cena para toda la familia —dijo Stormie.

Después se fue a la cocina junto con Mark.

¿Por qué las madres sueñan con ser abuelas? No lo sé. Aunque sí me gustaría saberlo.

—¡Ell! —Riker se paró junto a mí y pasó un brazo por mis hombros—. Tenemos que hablar —me susurró al oído.

—Yo, uh... Los dejaré solos, chicos. —Rydel me guiñó un ojo antes de alejarse un poco de mí—. Riker, por favor no lo mates. Lo necesito conmigo.

—Sí, sí. No prometo nada.

Del se alejó de nosotras; se fue con Laura, Lex y Sav.

—Hola, Riker. ¿Cómo estás?

—¿Mi hermana está embarazada, Rat? —Apretó su agarre a mi.

—Sí, bueno... No fue planeado... Sólo pasó. Ambos estábamos un poco ebrios, y bueno... Sí.

Me encogí de hombros, algo avergonzado.

—¿Ebrio? ¡No quiero que mi sobrino tenga un padre alcohólico!

—Oh, vamos. Fue esa vez, en mi fiesta de cumpleaños. Todos estábamos ebrios, ¿recuerdas? No puedes quejarte.

—Sí, eh, bueno... —Carraspeó con incomodidad—. Sólo cuida de ella. Y del bebé.

Palmeó mi espalda antes de irse con el resto de los chicos.

—Sabes que lo haré, Riker. —Y fui detrás de ellos.

Todos nos sentamos a la mesa una media hora después, cuando la cena estuvo lista. Una cena familiar. ¿Mencioné que mis padres también estaba allí? Todo era perfecto, todos reunidos, todos felices. Y Del...

Ella se veía tan emocionada, tan alegre, tan bella, tan... perfecta.

Me miró por un segundo, me dedicó una sonrisa y continuó conversando con Stormie.

No podía estar más emocionado por tener un hijo con la chica que estaba frente a mí, riendo. No podía estar más enamorado de ella.»

Y ahí estábamos ahora. Del estaba recostada en la cama de hospital, abrazada a mí, sollozando en silencio. Los chicos, Stormie, Mark, todos estaban en completo silencio.  Yo no sabía cómo consolar a Rydel porque, ¿qué palabras de aliento le puedes dar a una persona que acaba de perder a su bebé? Y es aún más difícil cuando se trata de tu prometida y tu hijo.

El doctor recién se había ido, dijo que necesitábamos estar solos, que él prefería no estar ahí, por respeto. Después dejó al resto de la familia entrar en la habitación.

Su recuperación fue rápida, principalmente porque, según ella, no fue doloroso el tener que... sacar al bebé de su vientre. No tuvieron que operarla. El doctor dijo que, en ese sentido, ella fue muy afortunada, porque realmente no sufrió. Físicamente, Del estaba bien.

Pero, psicológicamente...
Durante el día ella estaba bien, todo transcurría de forma normal. Casi como si nada hubiese ocurrido. Y sí, era lindo verla feliz, pero también sabía que esa sonrisa no era del todo sincera. Porque, en la noche, cuando nos íbamos a dormir, ella lloraba en silencio, usualmente hasta quedarse dormida. Sabía que yo estaba a su lado, que estaba ahí para ella. Y yo siempre me quedaba despierto con ella. Envolvía mis brazos alrededor suyo y la dejaba llorar, porque de alguna forma tenía que dejarlo salir. No es que me preocupase mucho, porque la entendía. Incluso yo lloraba también, a veces. Claro que eso ella no tenía porque saberlo. Uno de los dos tenía que mantenerse fuerte, y ese sería yo, porque ella no podría, a pesar de que era una persona fuerte.

—¿E-Ell? —susurró. Ambos estábamos en la cama, yo la sostenía contra mi, como todas las noches.

Esta vez no había pasado dos horas llorando. Su llanto se había detenido hace unos minutos, apenas pasada una hora.

—¿Si, nena? —susurré de vuelta, con voz tranquila—. ¿Qué ocurre?

—Yo... Yo solo quería agradecerte por estar aquí, aún cuando seguramente me veo del asco. —Rió ligeramente; pero no fue una risa de gracia, sino como una risa melancólica—. También quería decirte, que lo intentaremos de nuevo, Ell. Lo prometo.

—Hey, no tienes porque presionarte. —Sonreí suavemente—. En serio, yo puedo esperar.

—¿Te he dicho antes que eres el mejor?

Se giró, quedando frente a frente conmigo. La vi sonreír. Por primera vez en mucho tiempo (durante la noche, claro está). A pesar de que no había mucha luz, pude apreciar como las comisuras de sus labios se curvaban hacia arriba, mostrándome esa bella, bella sonrisa.

—Hm, no. Tal vez no.

Sonreí y le guiñé un ojo. Ella soltó una risita, y oh, dios, que bello era el sonido de eso durante la noche.

Eres el mejor. —Sonrió y besó mis labios cortamente—. Te amo, Ell.

—También te amo, Del —susurré sonriendo—. Ahora duerme, tienes una hora de sueño más que lo habitual.

Ella me abrazó y cerró los ojos, quedándose dormida rápidamente.

Y, ¿quién sabe? Tal vez las cosas cambiarían después de esa noche.

N/A: ¡Hola! Esta es la segunda parte de "Rydellington Es Real". La portada y el título están escritos con un solo signo porque esta en inglés, por eso también las comillas y no un guión largo.
Espero que les guste la portada. Y si no, pues se aguantan, ahre.
Tengo dos fics que actualizar, así que espero que me tengan paciencia. Se les agradecerá la paciencia.
Las amo, bai.

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