Bajada A6

Capítulo 1

-Siento que me olvido de algo!
-Dale Lola, tenemos todo organizado hace un montón, ya está!
-No, no, nos vamos de intercambio! De viaje por Paris! Me muero si me falta algo! Me falta.... ¡La malla! Me falta la malla que te preste Agustina, ¡te odio!
-Eh? Que malla? Tranquilizate
- La que, lo que.... Ayy, ¡la que me queda bien! Ay no, no, te voy a matar
- Ahh, esa malla... Bueno para! Mañana te la llevo listo y pone la alarma que ya me voy me que me quiero acostar temprano y ya son las 10, no te olvides
-Sisi igual boluda hablame después estoy re nerviosa
- Si! Seguro no me puedo ni dormir

-¡Agustina apurate!- Se escuchó desde afuera.
Rodé los ojos y me despedí rápidamente de mi amiga para parar a la loca de mi madre. Apenas llegué a mi casa me dirigí a ducharme para prepararme para mañana. ¡No podía creer que finalmente viajaría a Paris con mi mejor amiga! Ni siquiera la compañía de nuestras madres, las primeras dos semanas, podrían arruinarlo. Con todo listo me acoste. Agarré mi celular y me dispuse a poner la alarma a las 6 A.M. Luego abrí el mensaje de Lola:
"Te voy a conseguir a alguien, cueste lo que cueste. No te parece sufiente dos años?"
Le respondí: "sabes que eso es imposible"
"Y vos sabes que no me rindo"
Dejé el celular a un lado, ya de mal humor. Pero ella no mentía; hace dos años, por desición propia, evitaba a cualquier chico que intencionara algo más que una amistad. Pero no me mal interpreten, para mí era algo completamente normal. Ya que nunca fui fanática del amor, al contrario de mi amiga, quien lo consideraba un delito.
El sonido del celular interrumpió mis pensamientos. Era Lola. Como era de esperar seguimos hablando. Nos mantuvimos entretenidas por un buen rato, hasta que alguien llamó a mi puerta. La cara de mi madre se asomó cuidadosamente por esta. Como acto reflejo escondí mi celular bajó la almohada mientras fingía unos ronquidos que al parecer no la convencieron.
- ¿¿A vos te parece estar depierta a esta hora??
... No, definitivamente no lo hicieron
brr- brr- brr (sonó mi celular)
- Eso fue...
-Incómodo, Mamá! Como te vas a tirar un pedo- la corté apurada
Brr- brr- brr- quería ocultarlo a toda costa, sabía de sobra que no estaría de acuerdo con que use el celular de noche y con un viaje que nos esperaba en unas horas.
-Dame tu celular, ya son las 4 A.M dormite- no me quedó otra que dárselo. Después me fui a dormir.

Entre sueños sentí que alguien me zamarreaba y me percate de una voz que gritaba mi nombre. Abrí los ojos de mala gana y mi mama me dijo:
- ¡Agustina! Por qué no te despertaste? Te estoy gritando hace media hora. Ya tendrías que estar lista, ya subimos todo el equipaje. El avión sale en 40 minutos ¡Tenemos que estar saliendo ya!- me agarró del brazo bruscamente y me arrastró hasta el auto sin siquiera dejarme protestar. Me arrogó la ropa en la cara y me ordenó:- Cambiate.- En camino al aeropuerto mi mamá no paraba de hecharme la culpa. De mal humor le respondí:- ¡Pero mamá yo puse la alarma, fue tu culpa que me sacaste el celular!
-No Agustina, no pongas excusas. Lola y la mamá ya deberían haber llegado. Siempre lo mismo- Antes de que mi mamá terminara el sermón, siento los brazos de mi amiga rodearme. Le devolví el abrazo mientras escuchabamos a nuestras mamás hablándonos (ya más calmadas) mientras nos entregaban los pasajes:- Quédense al lado de la puerta de embarque que nosotras nos encargamos de los papeles y las valijas. Acuérdense puerta A3.
-Si si!- Dijimos para tranquilizarlas. Pero al instante nos miramos y ambas entendimos que no nos quedaríamos ahí.
-Vos acordate el número y yo la letra- Dije.
- No, yo la letra
- No, no yo la letra
- Bueno vamos! después vemos- Y sin pensarlo más nos dirigimos a recorrer el aeropuerto. Cuando algo llamó la atención de Lola:- Mirá boluda ¡El freeshop! Tenemos que entrar- y no me dió tiempo a reaccionar que ya había entrado. La seguí pero no la encontraba hasta que al darme vuelta la vi entusiasmada llenando el carro con cosas totalmente innecesarias.
-¿Te gusta esta malla? - Me dijo
- Pero te traje la tuya Lola. Esa plata dejála para el viaje.
-Bueno, vamos a la sección de ropa de chicos. A ver si encontrás alguno- Me dijo divertida. La fulminé con la mirada
- NO- le respondí.
- Era un chiste, vení, vamos a ver los perfumes- Y así pasó el tiempo hasta que un anuncio llamó nuestra atención

"- Queridos pasajeros, último llamado al vuelo con destino a Francia-Paris. Último llamado. Muchas gracias-"

- ¡Dale Lola que llegamos tarde!- Empezamos a correr enloquecidas, hasta que paramos y tomamos aire para hablar:
- Boluda ¿Cuál era la puerta?- preguntó Lola
- Creo que....
- ¿Qué...?
- La letra era A, vos te acordabas el número.
- ¡No! yo te dije a vos
- Bueno... no importa. Creo que era A5 no?
- No, no, estoy caasi segura que era A6
- ¿¿Casi segura??
-Corré que se nos va el vuelo, dale- Me apuró Lola- Corrimos a la puerta hasta dar con la encargada. Le quise entregar los pasajes pero choqué con ella y todos cayeron al suelo mezclándose unos con otros. -Perdoneme- digo. Habíamos perdido nuestros pasajes. Quedandonós sin opciones.
- No importa pasen- djo la encargada agachándose a recogerlos
- Una pregunta más.... Habrán entrado dos señoras acá? - Cuestioné algo preocupada
- Que van a saber ellas boluda! No se acuerdan seguro. ¡vamos!- Entramos al avión y nos ubicamos al final. En los últimos sitios libros que quedaban. Suspiramos de alivio.
- Vamos a avisarles a nuestras mamás que llegamos- le dije a Lola
Pero encamino se escucha el altavoz:
"- Queridos pasajeros, bienvendos a bordo. Porfavor abróchense los cinturones para emprender el vuelo con partida desde Buenos Aires-Argentina con estimación de 12 Horas con destino a la ciudad de Madrid- España-"

Miré a Lola estupefacta. Y ella comenzó a reírse
- te voy a matar! ¡Lola!
- ¡Nos vamos a España dos semanas y sin nuestras mamás!Quee puede pasarrr? ¡No va a pasar nada malo!- Me miró- ... O si?