80 días antes

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Blanco.
El color de lo puro, el color de la bondad y la tranquilidad. El color de las flores que me rodeaban, que se extendían sobre mi cabeza, la cual reposaba en el suelo.

Lentamente me fuí incorporando, mirando todo lo que no podía apreciar al estar acostada. Era una enorme pradera, por la que se distribuían millones de rosas blancas, dándole un aspecto frío e imponente. Unos grandes árboles, también con flores de color blanco, brindaban sombra al entorno y contrastaban con el celeste del cielo.

Todo era pacífico y perfecto, parecía salido de un cuento de hadas...

Pero entonces, entre medio de toda esa blancuzca calma, una nueva flor empezó a crecer. Era mucho más grande que las de su alrededor, y sus pétalos parecían teñidos con el color de la sangre más oscura. Simplemente se veía como una equivocación, fuera de lugar, rompía por completo la paz reinante.

Decidí acercarme, algo en esa rosa me llamaba la atención, me atraía. No estaba tan lejos de ella, pero al moverme parecía que nunca llegaría. Para cuando logré acercarme, me dí cuenta de que el cielo, antes celeste puro y sin nubes, se había tornado de un rosa claro desprovisto de matices.

Y de repente, una voz femenina, suave y dulce, habló.

"Donde todo tuvo su orígen,
Al cabo de 80 días,
Los dos se volverán uno
Y se retomará la vieja vida"

Y luego, todo se volvió oscuro.


°°°°°°°

Desperté.
Todo, la pradera, las flores, la voz de la mujer... Se había desvanecido.

Miré a mi alrededor. ¡Mierda! Otra vez me había quedado dormida en el tejado de una casa ajena. No se de que me sorprendía, ya se hacía costumbre.

Recogí rápidamente todas mis pertenencias que se encontraban allí desde la noche anterior y emprendí camino a casa. Salté de techo en techo, recorriendo al menos media ciudad para llegar a destino. Esperaba que no fuera demasiado tarde y que mis padres no estuvieran despiertos a esa hora de la mañana. Por las dudas, baje de los tejados un poco antes de llegar, cerca de una panadería, para comprar algo para el desayuno y calmar su enojo.

Ellos sabían de mis escapadas nocturnas y por que las hacia, pero se oponían a ellas muy a mi pesar. De todas maneras salía y seguía con mi trabajo, tratando de evitar el hecho de que ellos se enteraran.

Llegué finalmente a mi casa, volví a bajar del tejado y me meti por la ventana a mi habitación. Dejé todo lo que traía encima de mi cama y me dispuse a acomodar, tratando de hacer el menor ruido posible en el caso de que mis padres no se hubieran despertado ya. Pero la torpeza natural humana hizo su trabajo y con este, un ruido llenó la casa. Unos instantes después tenía a mi madre, con cara de pocos amigos, en el umbral de mi puerta.

- Lo siento, ¿te he despertado?- le dije, con la sonrisa más sincera que pude hacer para demostrar mi inocencia. Fallé estrepitosamente.

Ella se tomó el puente de la nariz mientras se apoyaba contra la pared.

-¿Cuantas veces te he dicho que no tienes que salir por la noche? Cuando no te vi en tu habitación está mañana, temí por que te hubiera pasado algo en tus extrañas excursiones y te hubieran atrapado.

- Me estás subestimando, mamá - dejé de acomodar para verla de frente - Va a ser complicado que me atrapen. Tengo bastante experiencia y lo sabes.

-¡Eso no importa! La seguridad ha aumentado y ahora las patrullas son más constantes - su cara reflejaba preocupación - Deberías preocuparte por ti misma.

No respondí. Era verdad que las patrullas estaban por todos lados, pero también era cierto que me cuidaba lo más que podía para evitar problemas. Me gustaba descubrir e investigar, pero tampoco quería ser hallada.

En un punto de nuestra conversación, mi padre se escurrió a mi habitación sin que me diera cuenta y cuando finalmente habló, me sobresalté.

-Deberías tener en cuenta nuestros consejos. Al fin y al cabo somos tus padres y nos preocupamos por ti - miró la caja con facturas y luego se dirigió a mi - No queremos que nada malo te pase.

- ¡No debería pasarme nada malo, solamente estoy estudiando algo de astrología, no estoy haciendo nada ilegal... !

- ¡Pero lo haces luego del toque de queda! - mi madre explotó - ¡Debería encerrarte para que te quedes quieta en esta casa pero seguramente te irías igual!

Y hecha una furia, salió de mi cuarto. Mi padre, que seguía conmigo, la vio alejarse para luego voltear hacia mí, encogerse de hombros, agarrar la caja de la panadería e irse sin decir una palabra

°°°°°°°

El resto del día lo pase en la ciudad, trabajando con el Sr Merriman. Él es un hombre entrado en edad, proveniente de la antigua Irlanda, a diferencia de mis abuelos que eran del Reino Unido. Realmente disfrutaba de su compañía, se pasaba todo el tiempo en su taller donde experimentaba y creaba cosas, algo que no a todos se les permitía. Estoy segura de que eso se debe a que rara vez sus ideas funcionaban.

Trabajar con él era uno de mis pasatiempos favoritos, solía hacer horas extra con tal de disfrutar mas tiempo en su extraño taller. El olor a madera y metal eran suficientes para hacerme sentir como en casa o incluso para ayudarme a concentrarme.

Pero ese día estaba muy perdida en mi nebulosa. Desde que me había despertado esa mañana en aquel tejado, no paraba de pensar en el sueño que había tenido; lo real que se había sentido, lo extraño pero a la vez cercano que era aquel Prado, y sobre todo esa voz y sus palabras...

"Donde todo tuvo su orígen,
Al cabo de 80 días,
Los dos se volverán uno
Y se retomará la vieja vida..."

-¡Kayla! - grito el Sr Merriman.
Me desperté de la burbuja en la que me encontraba, para prestar atención a su llamado.

-¿Sí?

-Alcanzame esa llave inglesa por favor - extendió su mano para tomarla cuando yo se la acerqué, para luego decir - Hoy estas algo desconectada ¿Te encuentras bien?

Reí ante su comentario.
- De hecho, lo siento pero creo que no soy capaz de concentrarme el día de hoy.

- ¿Y eso se debe a... ?

-Un sueño. Uno muy raro.

-Un sueño - repitió - Creo que es la peor excusa que me han dicho nunca-se quedó callado por unos instantes y luego preguntó - ¿Y por que te está afectando tanto?

-Basicamente era un sueño donde me encontraba en un campo de flores blancas, donde empieza a crecer una rosa roja y cuando voy a tomarla, una voz de mujer habla y me da un acertijo... Y luego desperté, por lo tanto no se si eso termina allí o no.

-Tienes unos sueños muy raros, pequeña - su risa inundó todo el taller - Pero quien sabe, tal vez esa sea tu próxima nueva aventura.

Puede que de alguna manera, el tuviera demasiada razón.

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Hello Soulmates!

Sí, después de casi un mes y medio desde que subí el prólogo, subo el primer capítulo. Y es más, de no ser por una personita, BianGhiorssi, este capítulo no hubiera sido publicado.

Ella se dedicó a torturarme la cabeza con que debía subir el siguiente capítulo durante la última semana, así que le debo a ella las fuerzas y ganas de sacar este capítulo a la luz. Y esta vez no voy a prometerte otra fecha de subida ya que se que Bianca se dedicará a hostigarme para que escriba la siguiente parte

Para todos aquellos con poca imaginación, imagen del prado en multimedia.

Los quiere mucho,
T.K. <3

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⏰ Última actualización: May 30, 2016 ⏰

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