❛⿻۬˖̥ ͭ 𝗖𝗜𝗥𝗖𝗨𝗦 ¹ ↳ 𝖬𝖨𝖪𝖠𝖸𝖴𝖴

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Yuichiro estaba entre la espada y la pared, no había pasado ni un día desde que salió del hospital y la noticia lo había dejado afectado pero, no solo era él.

Cuando el Ichinose se llevó a su hijo, Ferid y Mikaela notaron que algo no iba bien por lo que los siguieron, logrando escuchar todo lo que había mencionado Guren.

— ¡Yo me puedo unir al circo! — Mikaela salió de su escondite ganándose la mirada sorprendida de los Ichinose.

— Eso sí que no — se interpuso Bathory. — Mikaela he respetado cada una de tus decisiones pero no puedo aceptar que abandones tu carrera, vas a seguir estudiando.

— ¡Papá!

— Él ha hablado, no arruines tu vida por un capricho. — mencionó el azabache mayor. — Aún ni me dejan terminar de hablar, Yuichiro te doy dos opciones, una como jefe, eres uno de los pilares para el circo y necesitamos todo tu potencial — hizo una pausa. — Y como tu padre te doy la elección de dejar el circo, no quiero jugar con tu felicidad y si prefieres a este niño que continuar con tu carrera como trapecista, lo entenderé.

Yuichiro no sabía que elegir, él creció, vivió y aprendió en el circo y dejarlo ¿Sería lo correcto? ¿Qué le garantiza que su amor por Mikaela lo valía? Ambos se conocieron no hace mucho y aunque su amor era puro, tenía miedo que en algún momento se terminase.

Y eso lo noto el rubio.

— Yuu-chan.. yo no te voy a atar a seguir conmigo, si es tu sueño también será el mío ¿Entiendes? — el chico sujetó las manos de su novio.

— Pero un año es mucho tiempo y tú puedes.. — ni quería imaginarlo. — De verdad me gustas, te quiero Mikaela pero ¿Eso es correcto? ¿Podrás hacerlo?

— Te lo prometo, te esperaré todo lo que quieras

Todo el salón se hundió en silencio ya que desde el grito de Mikaela todos escucharon lo que sucedía.

— Es mejor que vayan a tu cuarto, Mika — su padre lo alentó y este asintió llevándose a su novio de ahí.

— Esto parece una historia mal contada, ¿No lo crees Mika?

— ¿Uhm, por qué Yuu-chan?

— Porque al fin podemos ser felices y debo irme, yo solo.. quiero más tiempo

— Y yo igual pero, cuando nos encontremos no habrá nada que nos separe.

— ¿Lo juras?

— Con mi vida.

Ambos chicos sonrieron para finalmente besarse, el rubio recostó al azabache en la cama y acarició sus mejillas. — Voy a hacerte el amor para que no me olvides

— No es necesario, nunca lo haré.

Cuando volvieron a besarse, intentaron ser silenciosos. Mikaela se dedicó a besar cada detalle del cuerpo de su pareja para luego fundirse en él, lo poco que quedaba de la noche se dedicaron a apreciarse cada uno hasta que finalmente quedaron dormidos.

Cuando el rubio despertó no encontró al menor pero si una nota escrita, Yuu había ido al circo por un asunto urgente y que regresaría más tarde. Bathory suspiro, fue hasta la cocina para prepararse algo de comer cuando casi se ahoga al ver a Guren Ichinose ahí.

— B-Buenos días, ¿se le ofrece algo? — el chico no entendía porque el hombre seguía ahí.

— Nunca me fui, me quedé hablando con tu padre y con algunas personas — intentó no darle mucho interés. — Llegamos a la conclusión de que Yuu puede quedarse, él.. creció en el circo porque no tuvo opción, yo ya había comenzado con el proyecto cuando lo adopte

Guren señaló unos documentos que estaban en la mesa. — Quiero que él aprenda y sea feliz, firme un acuerdo donde él vivirá bajo la custodia de Ferid mientras yo viajo, todos los gastos los cubriré yo

— Yo realmente.. ¿Por qué hace esto?

— Porque tengo miedo de que mi hijo vuelva a sufrir un accidente pero lo importante, ¿Puedo confiar en ti al entregarte a mi hijo?

— Sí señor, no lo haré dudar

— Bien, quise darte las noticias primero para que se lo digas personalmente a Yuu

— ¿En serio? Iré al circo ahora mismo

— Bien, ve. — cuando Ichinose creyó que el rubio ya se había retirado escuchó nuevamente su voz.

— Gracias por todo, señor Guren

Mikaela no lo vio pero en los labios del mayor había una sonrisita formada. 

. . . . .

Yuichiro alistada sus maletas al igual que todo el circo, la carpa ya había sido guardada y todo era transportado en los camiones. Yuu observó por última vez el lugar, en dos días se irían a Europa pero ¿Por qué no se sentía feliz? Era una nueva oportunidad para todos pero.. para él era alejarlo de la persona que se enamoró.

Soltó un suspiro y siguió en su tarea cuando la puerta de su camerino se abrió de golpe dejando ver a un rubio totalmente agitado.

— ¿Mika?

— Yuu-chan quiero casarme contigo.

— ¿Eh?