17:05
Habían pasado exactamente cinco largos minutos desde la hora de la 'cita'.
Marian se encontraba inquieta, ya sea porque su acompañante se retrasaba, o porque el dependiente del supermercado la miraba inquieto.
17:10
"Ya está" pensó "me ha dejado tirada. Me voy"
Y justo cuando se dirigió hacia la puerta, escuchó:
- ¿Sheila? - Era el dependiente.
- Sí, soy yo. - contestó desconfiada.
- No se vaya. El señorito que vino, solo unos minutos antes que usted, me rogó que si no llegaba a tiempo, le dijera que no se había olvidado - Paró - Mire, allí esta. - Comentó señalando a la puerta.
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Con amor, Anónimo
RomanceÉl había perdido una apuesta. Ella tuvo la suerte de pasar por delante de su grupo segundos antes de que dicha apuesta fuera cerrada. Desde ese día él le escribe notas cada jueves, ella simplemente las lee sin saber quien las escribe. Poco a poco ir...