lo bueno no dura para siempre

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Habías empezado el secundario en nueva escuela, chicas bonitas por doquier, hormonas alborotadas.
Por mi parte completamente enamorada, al punto de darlo todo por él, amándolo a más no poder, sufriendo por no verlo..
A partir de este momento comenzará a sentir la daga de la traición.
El comenzó a frecuentar grupos nuevos de amigos y amigas, todos muy liberales, todos muy callejeros. Salían a los bailes, se juntaban en la casa de alguno y pasaban horas enteras escuchando música y divirtiéndose, Miri siempre tuvo más libertad que yo así que ella se reunía con todos ellos y entre ellos , él.. Anto estaba siempre en la calle. Sus padres acaban de separarse, la madre había sido sorprendida saliendo de un hotel con otro hombre y el padre se dedicó a tomar alcohol. Anto tenía gran dolor por la situación, aunque a veces lo negaba. Se refugiaba en mis brazos , teníamos cada vez más encuentros a escondidas, yo sentia mucha mas adrenalina, ya no tenia tanto miedo a papá , a mamá y a mis hermanas cuando estábamos juntos, pero si cuando debía regresar sola a casa.
Un dia quise sorprender a Anto y apareci en un horario que no era habitual en mi...Anto estaba con un grupo de chicos y había dos chicas más, muy bonitas por cierto.
En primer lugar la situación me alegro por haberlo encontrado, pero automáticamente sentí malestar por saber que él estaba muy animado conversando con ellas, sonreí y les hacía ojitos. Creo que dude en primer lugar de hablarle pero después me anime y lo llame.
Lau:- Antoo!! Veeni

De lejos , no quise acercarme. Mejor así a la distancia, me dije para dentro de mi.

Anto:- Hola! Que haces por acá? A estas horas?
Yo sentí que él no quiso saludarme, fue algo raro pero se daba vuelta y miraba para donde estaban las chicas y sus amigos
Lau:- Quería darte una sorpresa, pensé que te alegrarias de verme.
El continuaba raro, yo me sentí incomoda, asi que decidi volver a mi casa.
Anto:- mmm ah , claro. Si me sorprendes.
El tono fue sarcástico y algo indiferente
Lau:- mejor me voy se me hace tarde.
Lo hiba a saludar y él me agarró del brazo y me dio un beso en la mejilla.
Anto:- vení más tarde si podes y hablamos tranquilos.
Lau:- veo, me fijo si puedo salir.
Anto:- dale si fijate si podes venir.
Me di la vuelta y camine una cuadra entera con una molestia en el pecho, estaba confundida, si bien todo estaba en mi cabeza, yo no había visto nada raro, eran amigos y amigas conversando.
Mis celos eran un punto y aparte, yo era celosa, de todos y de todo, y cuando me dejaban de lado y no me sentía el centro de atención me molestaba.
Así que volví rápido a casa. Y nadie noto mi ausencia.

Amor EternoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora