—¡QUE VIVA LA RESACA, CARAJO! —grité como pude y me eché sobre la mesa otra vez.
—¡Oiga, jovana! —oí el grito de Anna.
—Dime.
—Y que te besaste ayer con Dinwi —dijo y soltó una carcajada— ¡Ay, que asco!
—¡Tú te callas que ayer te vi con Hans! —le dije.
—¡EAHH! —gritó— ¡Shhh! ¡Cállate, pasi!
—¿Pasi?
—PASIVA —gritó y se rió.
—¡Hey, Anna! —gritó Tyron.
—Hola, Ty.
—¿Qué le pasa a nuestra Mer? —comentó sentándose en la silla a mi lado.
—Hola, bebé —dije depositando un beso en sus labios— La resaca.
—¿Te consiento? —me susurró al oído.
—¿Te doy un puño? —oí la voz de Jack y la risa socarrona de Anna.
—Ty, largo de aquí —asintió Anna.
—Si tú dices, zanahoria.
Tyron se paró de la silla y observé a Anna.
—Detrás de ti, pasi —me dijo ella refiriéndose a Jack.
Esa es la que le va a caer, el pasi.
—Pasi tu abuela.
—¡12 hijos! —dijo ella y se acostó en mis piernas— ¡Hola! ¿Qué buscas aquí? —le habló Anna a Jack con voz cantarina.
—Hola, Annie —plantó un beso en su frente— Nada. ¿En serio tu abuela tuvo 12 hijos?
—Jeh —se encogió de hombros.
—Ahj,iré a hablar con Ty.
—Mala idea, pasi.
—Anna, ¿nos disculpas un momento?
—Claro —sonrió— ¡Chupala, pasi! ¡Te veo luego!
Y esa fue Annabeth Jules Arendelle, mi mejor amiga.
—¿Para qué el hurón ese? Me tienes a mí.
—Eres un celoso.
—¿Estabas tratando de darme celos?
—No es mi culpa que no te sepas controlar.
Él me dio una mirada fría—Esto es la guerra.
—¿De qué hablas? —me reí.
—La guerra de los celos —me dijo.
—Prepárate entonces —dije y planté un beso en sus labios para dejarlo solo e ir a buscar a mi Annie.
La lu's in the house. arhenno.
Bothem y komenthen kon hamorsj. Las amo, bebas.