Estas últimas semanas, la vida sigue normal, sin embargo he notado cosas extrañas en mi casa y en mi oficina.
Por ejemplo, ayer al llegar a mi oficina de trabajo, había un crucifijo en el escritorio, lo cual pensé que algún compañero de trabajo seguramente entro a mi oficina y lo dejó olvidado ahí, pero ¿Por qué alguien entraría a mi oficina sin que yo esté? O peor ¿Quien rayos lleva un crucifijo al trabajo? En fin, debe ser algún católico obsesivo.***
Llego a casa, tomo una ducha caliente, y me pongo una pijama color turquesa.
Al acostarme en la cama, el teléfono suena."Ring, ring, ring"
Me levanto a contestarlo.
-Hola?
*respiraciones fuertes*
-Hola, ¿quién habla?
–Linda pijama turquesa.
-¿Quién es?
*se corta la llamada*
Enseguida reviso la casa, cierro las cortinas, visito la habitación de mi hija Sophie. Acaba de llegar mi esposo, Michael.
–Hola amor, ¿cómo te fue?-le pregunto, dándole un fugaz beso.
–Genial, me aumentaron el salario.
–Que noticia tan buena.-digo sonriente.–Ya es un poco tarde, deberíamos ir a dormir.
****
2:30 a.m
*Ring, ring, ring*
–¿Quien rayos llama a esta hora?-Dice Michael con voz ronca.
–Yo contesto, sigue durmiendo.-dije.
–Hola?
–Aunque tu esposo este contigo, No te sientas muy a salvo, porque nadie te salvará.
*se corta la llamada*
–¿Quien era?
–No lo sé, no hubo respuesta en la otra línea.-miento.
Me vuelvo a acostar, la inquietante voz de ese hombre me tiene nerviosa, no se quien pueda ser, alguien me esta jugando una broma muy pesada y no voy a caer en esa bromita tan fea. Gente inmadura.
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EL INTRUSO
HorrorTrailer: Son las 2:30 de la madrugada, los ladridos de mi Perro me despertaron. Oigo como si alguien estuviese entrando a la casa. Bajo por las escaleras rechinantes de madera vieja, reviso la cocina, la sala de estar, para mi sorpresa no hay nadie...