Donde empieza la tormenta.

4.

Alice me lleva al centro de la ciudad,cuando llegamos ya son las 11 ya que hemos parado a cenar. Qué bonito es,aún más por la noche. No acostumbro a salir,y la verdad es que de vez en cuando está bien.

Llegamos a un especie de pub. Esta lleno de gente por todos lados,y alcohol,mucho alcohol. Alice me arrastra hacia un grupo de gente,que yo no conozco,pero que no tarda en presentarme.

-Hola,chicos. Ésta es Amanda. -Sonrío a los amigos raros de Alice- 

Oigo a todos saludarme y les devuelvo el saludo con sonrisas,en cuanto puedo,me escabullo para coger una copa,la voy a necesitar.  Justo al darme la vuelta,choco con un chico y se me cae la bebida encima. 

-Joder,lleva cuidado. -Le digo lo más borde que puedo,pero al mirarlo a la cara veo que es bastante guapo. Es moreno,bastante más alto que yo,una cabeza más o menos,lleva los brazos al aire y puedo ver que lleva tatuado hasta el último trozo,no puedo ver su piel. A quién se le ocurre llevar tantos tatuajes,no puede estar bien de la cabeza. Tiene algo en sus ojos...Algo que hace que no pueda parar de mirarlo. Me mira de arriba a abajo sin ningún disimulo y hace una media sonrisa mientras se va.

-¡Al menos,podrías disculparte! -Digo sorprendida que no dice nada,vaya borde de verdad. Espero que no sean todos así. 

¿Qué hago yo ahora? Voy empapada, ¡Ufff! Mientras estoy pensando en qué hacer veo que el chico vuelve con una chaqueta en la mano.

-Toma,póntela. No me importas una mierda,no te emociones. Pero no quiero que sigas acordándote de mi a causa de un resfriado. 

-No quiero tu chaqueta,puedes quedártela. Si me resfrío o no,es mi problema,gracias. -Sí quiero su chaqueta,estoy muerta de frío,pero no quiero aceptar nada de un chico como este. Pienso mientras le sonrío y él me mira con un gesto que no puedo descifrar. Que ojos más bonitos tiene,pero intimidan,son verdaderamente intimidante.

-Vaya,no estoy acostumbrado a que me rechacen. Ya nos veremos. -Dice y con las mimas se va. Que chico más raro,enserio. Que maleducado,podría haberse presentado al menos,tampoco es que yo quisiera...¿O sí? No,no,definitivamente,no. Me siento rara,nunca había tenido interés por una persona así...No,no es interés,es curiosidad. 

-Una voz interrumpe mis pensamientos.- Amandaa,¿Qué te ha pasado? ¡Estás empapada! 

-Nada,un idiota me ha tirado la bebida encima. -Digo pensativa y finjo una sonrisa para que me amiga no se preocupe.-

-Ven,que estamos jugando a un juego. -Dice muy alegremente. No me gusta como suena eso. No me gusta casi nada de lo que me dice,nunca. Suele incitarme a hacer cosas que realmente no quiero. Como arreglarme,venir a esta estúpida fiesta,ahora jugar a un estúpido juego y conocer a un estúpido chico,con sus estúpidos preciosos ojos. Noto como mi cabreo va en aumento,yo sola hago que aumente en realidad. La estoy culpando a ella,y no tiene la culpa.

-Mira,aquí es. -Me alivia mucho cuando me informa de que vamos a jugar al Yo nunca ,el típico juego que se hace para que acaben todos más borrachos aún.- ¿Juegas?

A partir de ahí sólo recuerdo que bebí y bebí...