Estaba a punto de irme cuando alguien tomó mi brazo y me jaló para que caminara a su par, -¿Alessandra Phayne?- me dijo, me sobresalté y lo único que lograba decir era "¿quién eres?" cosa a lo cuál él no respondió, no me miraba a la cara y caminábamos en línea recta, llevaba una sudadera gris y pantalones negros; me detuve e intenté soltarme, -gritaré si no me sueltas en este momento- advertí mientras trataba de escapar. -Grita y mueres.- me respondió, -¿a dónde me llevas?- pregunté anonadada; y una vez más no respondió. Quise gritar y él posó su brazo en mi cuello, con una navaja, entonces supe que no estaba bromeando, me asusté demasiado, sudaba frío y mis piernas y manos temblaban. No tenía idea de cómo pedir ayuda.
Al llegar a una esquina me miró, tenía unos ojos azul eléctrico sumamente dominantes y hasta cierto punto bonitos, no mostraban ni una sola pizca de miedo o nervios, me dijo algo a lo que no entendí y no recuerdo nada más.
Ese fue el comienzo de todo.
ESTÁS LEYENDO
SÍNDROME DE ESTOCOLMO
Mystery / ThrillerAlessandra Phayne nunca se imaginó que esto pasaría, ni cuándo, ni cómo, ni porqué y hasta la fecha no puede explicarlo, porque todos en su momento no la encontraron pero cuando volvió; la historia que contó dejó atónitos a todos.