Después De Ti

C4

Prov Sonia's

Siento mi cuerpo pesado, intento mover mi dedo índice y lo logro con mucha dificultad, mi respiración es lenta y pausada, que demonios me sucede? Abro mis ojos lentamente y una luz blanca encandila mi poca visibilidad, parpadeo un par de veces fuerte y recorro toda la habitación con la mirada, mesas metalizadas, sillas de cuero blanco, un monitor de signos vitales, suero, cables, todo blanco y mucha luz, genial estoy en un hospital, me levanto lentamente y adolorida, un quejido sale de mis labios, levanto mis abrazo con cuidado y noto el cable de suero en mi brazo izquierdo, me lo arrancó de un tirón y rápidamente sostengo mi cabeza con ambas manos, un fuerte dolor me hizo soltar una lágrima que cayó sobre la bata blanca que traía puesta, la puerta se abre y fijo mi mirada hacia ella, detrás de la puerta estaba Ethan tenía vendas en ambas manos y en su cabeza.

- No debiste haberte sacado eso - señaló el suero a mi costado y cerró la puerta detrás de él.

- Me...me lastimaba - me acomode en la camilla y lo mire fijo - te duelen? - mire sus brazos y el negó con la cabeza.

- No es nada! - se acercó a mi, quedando justo enfrente - nos salvamos de milagro - me miró a los ojos y desvío mi mirada nerviosa a mis manos, jugaba con mis dedos.

- Gracias a vos... -

- Sonia - acarició mi rostro y juntamos nuestras miradas - prometí cuidarte, recuerdas? -

- Pensé que lo habias dicho refiriendote a otra cosa -

- Yo también - sonrió - pero me di cuenta que en verdad quiero cuidarte, de todo - sus ojos se clavaron en mi dejándome sin palabras y de boca abierta - m..me gustas mucho Sonia - desvíe mi mirada del asombro pero movió mi rostro para nuevamente juntar nuestras miradas - más de la cuenta -

- Yo... - sonreí nerviosa - No se que decir - su rostro se frunció - También me gustas - sonrió mostrando su perfecta y brillante dentadura, sus ojos se clavaron en mis labios y lentamente nos acercamos para unirnos en un beso, al separarnos ambos sonreímos, como dos tontos por así decirlo, acomodo mi cabello detrás de mí oreja y ambos fijamos nuestras miradas en la puerta que se abrió.

Entraron 2 hombre vestidos de negro y gafas, detras de ellos un hombre canoso vestido de traje azul.

- Podemos hablar C4? - Ethan me miró curioso por saber por que me habia dicho C4 y quien era el hombre de voz gruesa y muy elegante, yo solo asentí.

- Ethan, nos podrías dejar a solas? - lo mire a los ojos, el volvió a mirar al hombre y fijo su mirada en mi.

- Vas a estar bien? - asentí y beso mi frente antes de salir de la habitación.
Uno de los hombres vestidos de negro cerró la puerta y el hombre de azul se acercó a mi y abofeteó mi mejilla dejando mi cara de lado.

- Cómo dejaste que sucediera? - antes de que pueda soltar una palabra el hombre continuo - Es la segunda vez que lo haces! No sirves para nada! -

- Yo... -

- Vos nada! Por andar haciéndote de la pendeja de 18 años rebelde lo hechaste a perder todo! -

- Es la edad que tengo no? -

- Es la edad que tienes? - me miró fijo - si lo es pero le comento señorita rebelde, ESTAS EN UNA MISIÓN DE VIDA O MUERTE, NO PODES ANDAR HACIENDO PENDEJADAS SÓLO POR QUE SE TE ANTOJA! -

Me moví rápido y tome del saco del hombre casi ahorcandolo, los 2 hombres vestidos de negros sacaron sus armas y me apuntaron.

- Yo no elegí esto! - le susurre al oído y lo solte bruscamente.

- Bajen las armas señores - el hombre hizo una seña con ambas manos y los hombres le obedecieron, este acomodo su saco y fijo su mirada en mi - no tenes derecho a elegir nada - amague para hablar - Vos sólo seguis órdenes, al igual que ellos, al igual que yo, nadie puede elegir! - me tomo con su mano derecha el mentón - cariño no entiendes que solo somos unos simples perros faldero que hacen lo que el jefe quiere - soltó mi mentón bruscamente - Si sabes sólo que te conviene a ti y a tu familia me harás casó -

- Mi familia! - tuve un breve recuerdo de mi madre mi padre y mis dos hermanos menores, Luis y Liam - Donde están? -

- Descuida nena, ellos estarán bien mientras vos cumplas con lo que debes hacer! - asentí - toma nota amor! Haz que Ethan te odie, no te preocupes por lo que digas nosotros nos encargaremos de que el no recuerde tu rostro pero si tus palabras - mostró una pequeña maquinita, la conocía, con ella lograban sacar fregmentos de tu memoria - Tienes tu tercera oportunidad, no la desperdicies! - sonrió arrogante

- Que ganan con eso? - solté un par de lágrimas.

- Nosotros nada pero esta es tu leccion señorita rebelde, si no lo haces lo tendremos que matar! - solto una carcajada y salio de la habitación junto a los hombres que entraron con él.

Apenas salieron, Ethan entró a la habitación, respire ondo y limpie mis lágrimas de inmediato.

- Quienes eran? Y por que te dijo... - pregunto cerrando la puerta.

- Eso no te interesa! - soné seca.

- Estas bien? Te hicieron algo? - se acercó a mi tocando mi brazo pero me zafé de su agarre bruscamente.

- No me toques! -

- Que te sucede? - su rostro reflejaba confusión por culpa de mi reacción.

- Ethan puedes irte? - el vacilo un poco - Quiero que te vayas! -

- Sonia que... -

- No preguntes sólo largate! - con mis manos sujete fuerte las sábanas no quería llorar, no debía llorar.

- Sonia que te pasa? - intento abrazarme pero lo empuje.

- Ethan! - por dios discúlpame Ethan por lo que voy a decir dije dentro dentro mi - en serio creíste que podrías gustarme? Un pendejo caprichoso y mimado como vos? Que estúpido sos! - se veía sorprendido por lo que dije.

- Sonia! Que estas diciendo? - frunció su ceño.

- La verdad Ethan, te ves tan patético ahí luciendo como un bobo enamorado, no entiendo como fuiste tan idiota de creer mis mentiras, no me gustas, nunca me gustaste y jamas me gustaras, me das asco, me dan asco las personas como vos, ahora hazme el favor de desaparecer de mi vista, alejate, no quiero volver a verte nunca más! - hablaba entre dientes, con bronca, bronca a mi misma por ser tan mierda por decir lo que no quería lo que sabía que le dolería, bronca, ganas de pegarme a mi misma.

- Yo... - Ethan derramó lágrimas sus ojos estaban repletos de ellas, negaba con la cabeza, no entendía, no lo podía creer.

- Me aburrí de seguirte el jueguito, me aburríste, largate de mi vida Ethan! - mis ojos se llenaron de lágrimas que no quería soltar.

- Mírame a los ojos y decimelo, te juro que me doy vuelta y no me volves a ver la cara nunca más! - lo dijo con voz entre cortada.

- VETE ETHAN! - grite apretando aún más fuerte las sábanas a mis costados, me negaba a mirarlo a los ojos.

- Mírame a los ojos - susurro, respire hondo, junte fuerzas de donde podía y finalmente lo mire a los ojos.

- Desaparece de mi vida Ethan - susurre y el asintió, su rostro estaba repleto de lágrimas, giro y salio por la puerta dando un fuerte portazo.
Apenas salió tire al suelo el suero y una mesa metalizada con herramientas médicas, tome la almohada de la camilla, tape mi cara apretando la fuerte y solte un grito desgarrador, sentí como raspaba mi garganta, rompí en llanto.

Me odio...