Sin Aire

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Se acercó al barandal de la terraza, no podía seguir aguantando todos esos sentimientos  que volaban en su corazón y en su cabeza. Por primera vez sentía que no le quedaba nadie a quien acudir en esos momentos de desesperación. Por primera vez sentía que no le quedaba nadie a quién pedir ayuda.
Sus manos temblaban de la locura y su cabeza le decía que se detenga, que todo estaría bien si se alejaba de la caída de 13 pisos. Pero su corazón por otro lado estaba tan oscuro y tan falto de afecto que sabía que no le quedaba otra alternativa, que si saltaba aquel barandal todos sus demonios y sus preocupaciones se irían con ella. Así mismo, su cuerpo no intentaba demasiado parar, aquel seguía avanzando cada vez más cerca de su muerte.

"La Allison de 11 años no me hubiese dejado hacer esto. Que idiota era a esa edad, tan inocente, pensando que la bondad era recompensada y la maldad castigada."  Pensó Allison, y se acordó de aquella divagación a los 14 años donde se dio cuenta que no existía un bien y un mal, que era un truco de padres para que sus hijos comieran toda la comida y uno de la propia conciencia humana para que no ocurra un descontrol.

Sonrió débilmente y la comisura de sus labios tocó su lagrima que caía lentamente por su mejilla roja de tanto llorar.Sin duda no extrañaba para nada a la buena Allison, a la Allison que se dejaba manipular por todos a cambio de simple amistad. A la Allison que utilizaban para todo, y ella feliz de hacerlo. A la Allison que burlaban por su forma de vestir y sus gustos musicales. Por eso, ella no extrañaría a ninguno de sus compañeros de curso.

Flashback:

Amaba sentir sus grandes manos rodear su cintura, amaba el olor de sus remeras cuando se las ponía por puro coqueteo, amaba jugar con su cabello negro. Simplemente amaba tenerlo cerca. Era algo que no quería perder nunca.
Se habían conocido por unos amigos de él, aunque solían ser los que se burlaban de ella, él se diferenciaba mucho de aquellos idiotas. Tenía el cabello negro lacio y unos hermosos ojos verdes que la volvían loca, era muy parecido a ella. Era un incomprendido en su forma de ver el mundo y las cosas que lo rodeaban. Casi no compartía sus sentimientos debido a que temía a ser lastimado y es algo que luego ella copió ya que solía resultar.

Su primer beso había sido en la fiesta de un amigo de él  y esa noche ella se prometió no dejarlo ir nunca. Lastima que en una relación siempre habrá uno que ame más al otro de lo que se quiere a sí mismo.

Fin Del Flashback:

Recordó a Simon y solo hizo que tenga mas ganas de saltar con tal de borrar aquellos recuerdos que la acechaban. No quería volver a verlo, quería que el se arrepintiese toda su vida de lo que le hizo. Quería que todos se sintiesen culpables y arrepentidos, pero en el fondo sabía que no sería así. Nadie lloraría su muerte, nadie se sentiría arrepentido. Lo sabía por experiencia propia, ellos solo se reirían como de todo lo demás.

Sus finos dedos tocaron el metal del barandal y sus manos se aferraron rápidamente a él. Aquél metal parecía no haber sido limpiado en mucho tiempo ya que al sacar las manos las tenía llena de polvo.

"Más manchada estarás en cuanto te des contra la calle, no te quejes" Pensó al tiempo que asomaba la cabeza y veía los pocos autos que habían, los pájaros volando cerca de la ventana de su habitación, y las gotas de lluvia impactar en la acera de la forma más delicada para ser lluvia.
Tal vez su destino era este, tal vez si saltaba nacería otra vez. Con otra familia, con amigos, con un mundo menos gris, siendo extrovertida y simpática. Allison siempre había dicho en todos sus llantos que ella no había nacido para vivir este mundo. En este mundo tan cruel y malvado, que la habían convertido en un monstruo aterrador para la Allison de 7 años.

Ella no iba a extrañar a nadie, nadie iba a extrañarla a ella.Simplemente pasó sus piernas al otro lado del barandal y se quedó ahí sentada en el frío metal. Mirando hacia abajo dejando que sus lagrimas caigan en la acera camuflándose entre la lluvia. Finalmente se paró en el otro lado del barandal con las manos aferradas al barandal, como si estas no quisieran saltar, pero ella si quería abandonar este mundo  así que cerrando sus ojos fuertemente se dio la vuelta soltó las manos del barandal y simplemente se tiró con su vestido negro el cual solo le recordaba a como fue si vida. Oscura.

My Last MissionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora