Amor Entre Pantallas

Día 6.

Lunes. Como los odio. Me despierto a las 7 de la mañana, y me dirijo a la ducha. Estoy agotada, ayer me dormí a las 3 de la mañana, me desvele hablando con Diego. Como quiero a ese chico, es amable, simpático, cariñoso, romántico... Y miles de palabras mas pueden describirlo. Me ducho escuchando la canción Love Yourself de Justin Bieber. Al acabar la canción, salgo y me visto. Me pongo una sudadera entera gris, y unos leggins negros. Me pongo unas zapatillas de deporte y me hago una coleta. Odio como me queda, pero el profesor de educación física obliga llevarla. Bajo a desayunar mientras miro mis redes sociales. Mensaje de Diego "Buenos días, princesa" '¿Como se puede ser tan mono? Pienso para mi. Desayuno y al salir me encuentro con Elena. La miro de arriba a abajo con cara de asco, y me voy. De camino al instituto, me encuentro con Andrea. Está sonriente. Me encanta que este así, no soporto verla mal. Llegamos al instituto y veo a Raúl dándole un beso a Brittany. Todos son iguales, no merecen la pena. Menos salvo uno, Diego. Me paso las 6 horas pensando en él y en lo que hará. Al salir, espero a Andrea y nos vamos. De camino a casa vemos a Pelayo cogido de la mano de otra chica. Andrea no puede evitar llorar y yo la abrazo. Cuando pasan, Pelayo se queda unos segundos mirándonos. '¿Como puede ser tan cabrón?' Andrea no responde. Continuamos el camino de vuelta y llegamos a su casa, después continuo sola hasta la mía. Como un bocadillo improvisado y me subo a mi habitación. Diego me dice que si le apetece hacer una videollamada a través de Skype. Yo nunca había echo una videollamada con un desconocido, pero tenía ganas de conocerlo. Cierro la puerta y me conecto a Skype. Agrego a Diego y me manda una petición de videollamada. «Aceptar» Le doy y saltan las webcams. Es un chico precioso, alto, moreno, ojos marrones, sonrisa perfecta, nariz perfecta... Me llamó la atención su pelo, su pelo largo y rizoso, me encantaba. Llevaba una camiseta amarillo fosforito, con el escudo del Real Madrid. Nos quedamos callados varios minutos, hasta que el decide empezar la conversación. '¡Hola!, tenia muchas ganas de conocerte' Me dice con una gran sonrisa. Yo le respondo 'Yo a ti también' Y así empieza la conversación. Nos pasamos hablando toda la tarde. Me dice que solo vive a 50 minutos de mi casa, que si un día le apetecía quedar, a lo que yo acepté, lógicamente. Quedamos el sábado de esta semana, estoy súper nerviosa. Nos despedimos y colgamos. Que rápido se me paso la tarde hablando con él. Es increíble. Miro la hora, las 22:54. 'Va siendo hora de irse a dormir' Pienso. Bajo al piso de abajo, cojo una manzana, me la como y subo. Me acuesto pensando en la tarde que había vivido. 'Que ganas de que sea sábado. ' - digo en voz baja y me duermo, pensando en él.