Capítulo 3

226 27 10
                                    

Hacía una media hora que había llegado a mi destino, Ken me mandó un mensaje; vendría a buscarme junto a su madre.

Estaba emocionada ¡Por fin vería a su madre! Tenía mucha curiosidad por saber como era.

Ken hablaba mucho de ella, el realmente la echaba de menos...

-¡Su!- Gritó alguien a mi espalda sacándome de mis pensamientos.
Me giré y vi a Ken corriendo hacía mí.
-Jo, te he echado mucho de menos.- Murmuró mientras nos abrazábamos fuertemente.
-Yo a ti también Ken.- Respondí con una sonrisa mientras rompíamos el abrazo.
-¿Ella es Su, cariño?- Pregunto una voz femenina detrás nuestro.
-Sí mami.- Afirmo Ken.
La madre de Ken era increíblemente joven, parecía su hermana.
Era de nuestra estatura, un metro sesenta y pocos, su piel era muy blanca con algunas pecas esparcidas por su cara. El parecido entre ellos era increíble.
Llevaba el cabello corto de color marrón cortado de una forma muy parecida a la de Ken, y para mi sorpresa llevaban exactamente las mismas gafas.
-Es un placer conocerla al fin.- Saludé con una sonrisa mientras agarraba mi maleta.
-¡El placer es mío, cariño!- Dijo con una sonrisa mientras abría sus brazos para abrazarme de manera maternal.
Se giró a mirar a su hijo.- No exagerabas cuando decías que era muy bonita.- murmuró pero la pude escuchar.
Ken se puso rojo de la vergüenza.-¡Mamá por favor!- Se quejó cruzándose de brazos.
La madre de Ken y yo reímos al ver su adorable reacción.

-Por cierto no se su nombre.-

 -Me llamo Clara, cariño.- Dijo con un tono maternal.- Pero como se que vas a echar de menos a tus familiares me puedes llamar mamá.-

Aquello me causó mucha ternura, ella era adorable.
-Gracias Clara.- Le dediqué una cálida sonrisa y empezamos a caminar hacía el coche para llegar a su casa.
Una vez allí, Clara y Ken me hicieron un tour por su casa. Era una casa hogareña, con muchas fotografías de Ken de pequeño, sus padres, sus abuelos e incluso de algunas mascotas.
-¿Esta tortuga era Galletita?- Le pregunté a Ken enseñándole una fotografía de una tortuga.
-¡Sí!- Afirmó muy entusiasmado.- No pensé que te acordarías de eso...- Se puso colorado.
-Que mono eres Ken.- Susurré acariciando su mejilla con mis dedos.
El se puso aún mas nervioso al sentir mis manos en su mejilla.
-Bueno, es tarde así que debería irme ya, Clara.- Dije apartando suavemente la mano de la mejilla colorada de Ken.
-De acuerdo Su, pero ten cuidado.- Me abrazó con cariño.-Espero que no te pierdas.-
-Yo también espero no perderme.- Murmuré con una sonrisa.
-¡Te acompaño Su!- Dijo Ken con entusiasmo.
Nos pusimos las chaquetas y salimos de su casa.
Íbamos hablando tranquilamente, realmente me gustaba mucho la compañía de Ken... Si no fuera tan..."acosador" y un poco ''gallina'' me plantearía salir con él... Aun que no fuera el hombre mas guapo del mundo...
-¡Ey, gafotas!- Gritó alguien a nuestras espaldas sacándome de mis pensamientos.
Ken se tenso y note que temblaba un poco.
No sabía bien lo que alguien había gritado ya que no estaba prestando mucha atención.
Me giré buscando la persona que había gritado.
Ken seguía temblando así que agarré su mano y la apreté fuertemente, demostrándole apoyo.

Vi a un chico pelirrojo, alto, de piel blanca y ojos grises acercarse a nosotros...Era muy guapo, pero seguramente sería un gilipollas.

-Veo que ya has vuelto, ¿Eh?- Dijo con una sonrisa burlona.- Y acompañado.- Me miro de pies a cabeza.

-¿Y tu quien cojones eres?- Pregunté malhumorada.

Si Ken estaba así de nervioso era por que ese chico le habría echo algo... Y las pintas que llevaba no me hacían pensar lo contrario....

-Oye tranquila.- El pelirrojo frunció el ceño.- Me llamo Castiel.- 

-Vale.- Dije cortante.- ¿Que has gritado hace un momento, Castiel?-

La Chica Extranjera (Corazón de Melón/CDM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora