Esta es la primera historia de mi amiga, por favor, se q es algo larga. Pero denle una oportunidad.
Bueno después de tanto.... empieza la historia. si alguien alguna vez lee esto díganme si les gusto :3
Su verdadero nombre era Anais Brown y antes de todo lo que sucedió ella era una chica común, bueno casi común. Ella no tenía amigos y era en extremo tímida. Quería relacionarse con las personas, pero no podía. Luego de años dejó de intentar ser como los demás y se convirtió en la chica más callada de su curso. Y también el blanco de burlas, Ana, como le decían, no prestaba mucha atención a esas cosas y solo prestaba atención a lo que decía el profesor y en los recreos iba a la biblioteca, ella no molestaba a nadie. Un día una de las chicas más populares del salón, Juliana, hizo una fiesta y le dijo a Ana que quería que fuera. Ella se sorprendió porque nunca la habían invitado a una fiesta y nunca fue a ninguna, y eso que ya tenía 15 años. Aceptó de inmediato y con una semana de anticipación Ana se compró un vestido color rojo sangre, que hacía resaltar su piel blanca y su cabello rubio. También se compró unos zapatos con taco de color negros y como sentía que le faltaba algo se puso un cinturón de cuero negro, aunque era un poco viejo le quedaba muy bien. A su cabello solo lo dejó suelto para que se vea lo largo que era, le llegaba hasta la cintura y unos cuantos centímetros más . Sus ojos avellana miraban fijamente el reloj esperando ir a la fiesta, aunque ella no sabía quien iría.
Al llegar a la fiesta estaba entusiasmada todas las chicas alagaban su hermoso vestido y su maquillaje tan simple, solamente llevaba deliñador y labial rojo. Ana no quería que el tiempo pasara, ya eran las dos de la mañana y la fiesta duraba hasta las cinco, o por lo menos sus padres la vedrían a buscar a esa hora. Todo habría salido bien en la fiesta si no hubiera empezado a llover. Empezó a llover de golpe todos entraron a la casa excepo Anais que parecía que su mano se había trabado con algo, cuando se dió vuelta para ver que era lo que no la dejaba entrar a la casa se dio cuenta que el que la detenía era Gabriel un chico de su curso al cual la mitad de las chicas le parecía lindo. Pero a ella solo le parecía tonto e inmaduro.
-¿Qué estás haciendo?-le dijo ella enojada porque se estaban mojando en la lluvia.
-Quiero hablar con tigo. Tenes un cuerpo muy lindo y te queda muy bien con ese vestido.
-Suéltame.
-La fiesta recién está empezando.
Anais tenía una lijera sospecha de lo que estaba a punto de suceder pero le parecía rídiculo así que solo se quedo mirando a Gabriel. Él la tomo de la cintura e intentó violarla, ella se defendió y sacó fuerzas que no sabía que tenía para quitarselo de encima y empujarlo tirandolo en en suelo. Ella quería irse pero no pudo evitar acercarse a él y patearlo en la cara haciendo que su naríz sangrara. Gabriel todavía tirado en el piso y con la sangre llegando hasta su boca, se limpió y le dijo.
-Vas a ver cuando te encuentre sola, la próxima vez que te vea no solo te voy a violar sino que te voy a matar.
Anais entró corriendo a la casa y cuando todos la vieron empezaron a reir, fue al baño a verse en el espejo y entendió porque todos se reian de ella, no solo estaba empapada sino que su maquillaje se había corrido por la lluvia, el deliñador se había corrido por debajo de sus ojos dando la sensación de que lloraba lagrimas negras y el labial también estaba corrido de una forma tal que parecía tener una gran boca roja y triste. No quería estar más allí, pero su telefono no andaba porque se mojo mucho y no podía llamra a sus padres, su casa quedaba a unas quince cuadras y ella sabía donde tenía que ir. No se limpió el rostro porque para ella el maquillaje representaba lo que sentía en ese momento. Salió del baño y escuhó varios murmullos a su alrededor, no les dió importancia como siempre hacía an la escuela, salió de la fiesta y se dirijió a su casa con la lluvia y el viento a paso rápido. En el camino se encontró con un tipo que le mostró un arma y le dijo con voz gruesa que le diera el telefono, sin decir nada se lo entregó y continuó con su camino, el tipo parecía estar muy sorprendido por la reacción de Anais, pero no dijo nada y se fue.
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TODO SOBRE CREEPYPASTAS
RandomTe gustan las creeepys? entonces deberías leer esto. Origenes, sus invocaciones y curiosidades de cada una de las creepys.