UN AMOR INESPERADO

Capítulo 3

Había sido un día cómo cualquier otro, era martes, por lo cuál había quedado con Becca para comer, su papá cocinaba delicioso y tan sólo vivía a 5 min del colegio, era perfecto para ir a pasar un buen rato y regresar al instituto para el entrenamiento con el equipo a las 4:30pm.

El timbre que indicaba que las clases habían finalizado sonó a las 3:00 pm en punto y todos los estudiantes salieron corriendo, por supuesto que yo no fui la excepción, el ultimo periodo de clases habia sido tan tedioso que sentia que las últimas dos horas habian sido cinco.

Cuando salí me encontre a Becca afuera del instituto con nada más y nada menos que con Danna.

Danna Foster y Becca Hudson, mala convinación.

Danna tenia la misma edad que nosotras, era bajita, no era delgada y su cabello era rubio cenizo, su forma de vestir resaltaba entre los estudiantes del instituto y no precisamente por usar marcas costosas, ni tampoco por vestir a la moda. Ella era todo lo contrario a lo que se veía diario en el Colegio Cornerstone, siempre vestia de negro y se ponia una gruesa linea de delineador negra al rededor de los ojos.

Mientras que por el contrario Becca casi siempre usaba ropa semi formal como jeans con blusas con cuello de picos, un collar grueso y dorado y un pequeño saco, no hablaba con todos pero las personas con las que se relacionaba la querian mucho. Castaña, ojos café y de piel blanca y ojerosa.

Al verlas me dirijí hacia ellas y las saludé como siempre, con un beso en la mejilla.

Algunas personas que pasaban nos saludaban a las tres porque ¿quien podría odiar a Becca Hudson y a Ellie Monroe? nadie. Eramos amables, y yo era todo lo contrario al prototipo de porrista hueca y odiasa que todos creaban en su mente.

Y hablando de porristas huecas...

Giré buscando a Dalia con la mirada pero no la vi, en su lugar mi morada se encontró con una mirada que ya conocía, Madison y Harper Clayton.

-Harper, ¿ya viste lo que está ahí?

-Claro que si, Madie, es la porrista fracasada junto con sus marcianitos, la niña pobre, gotica y la lesbiana

Me retracto, si habia quien nos odiara, ellas; las porristas huecas.

-Soy su capitana, idiotas- dije apretanto la mandivula

Ellas comenzaron a reírse y les di una mirada fulminante

-Cien vueltas a la cancha aparte de las 20 de calentamiento, y mas les vale llegar puntuales si no, diez vueltas mas por cada 5 min que lleguen tarde- dije seria

Madison y Harper Clayton, huecas, superficiales, malas estudiantes, hermosas, exelentes gimnastas. Madison; castaña, cabello perfecto que caé en ondas suaves a la altura de su pecho, de las dos, la controladora, novia del capitan del equipo de futbol del instituto, Issac Brown, el mas grande idota de toda la escuela, y mi ex novio.

Harper; la hermana que hace todo lo que la otra le dice, novia del co capitan y mejor amigo de Issac, Jackson Smith, rubia "natural" cabello lacio a la altura de los hombros.

Issac Brown, hace un año no era tan idota, hace un año llevábamos saliendo un poco más de un año. Hasta que se le fundió el cerebro por tanto usar el casco del equipo, y se convirtió en el idiota número uno del colegio, efectivamente, su mejor amigo Jackson era el idiota número dos.

Mientras que yo salía con Issac, Dalia salía con Jackson. Hace un año Dalia y yo sólo éramos parte del equipo, no capitana y co capitana, pero ellos si lo eran del equipo de fútbol, entonces decidieron que su reputación en la escuela sería más envidiable si comenzaban a salir con las líderes de porristas, Madison y Harper Clayton.

-Brujas huecas- les gritó Danna

-Cállate Danna, sólo dejalas- Dijo Becca mientras veía sus zapatos

Fruncí el ceño -¿Que pasa, Becca?

Demonios, olvidé que Becca no era lesbiana, ella era bisexual y hace unos meses una chica idiota la estaba conquistando hasta que Becca descubrió que todo era plan de Madison y Harper, que se pusieron a difundir el rumor por todo el instituto.

Ella me dio una mirada asesina y yo sólo me quede callada.

Mi celular comenzó a vibrar y la pantalla se iluminó.

Diablos, era Natalie, olvidé por completo que hoy se suponía que debía estar con Andrew Stonem a las 3.

Trague saliva y contesté.

-Hey, Natalie.- Dije alargando la "e"

-¿Donde estás?

-Oh, ya sabes, con Andrew, donde debo estar

-Sabes muy bien que los martes y jueves tienes que estar a las tres en punto con él para así poder estar 4:30 con tu equipo, entrenando

-Lo se, yo estoy con él

Se escuchó un suspiro del otro lado de la línea.

Danna y Becca me veían sin entender

-Elizabeth, él está aquí, conmigo.

-Demonios- susurré

-Te quiero en el aula 15 en este mismo momento, y como son diez para las cuatro, no te vas a ir de aquí hasta cumplir con la hora y media de tutoría.

-Pero Natalie, hoy hay práctica con él equipo, y ya sabes que... - No logré completar mi frase porque ella ya me estaba interrumpiendo.

-Si, como capitana sólo tienes permitido faltar 5 veces a los entrenamientos y dos a los partidos, será mejor que ya no faltes más ni al entrenamiento, y mucho menos a las tutorías

Colgué

Maldición, mascullé.

-¿Que sucede?

Danna hizo una mueca

-¿Para que te llamó la directora?

-Olvidé contarles que soy tutora de Andrew Stonem

-¿QUE? gritaron a unisonido

-Si, nos vemos, voy tarde-/Dije mientras me daba la vuelta para comenzar a caminar

Mientras caminaba hasta el aula en la que, seguramente Andrew y Natalie me estaban esperando aproveché para mandarle un mensaje a Dalia.

Para: Dalia Crowell 3:57 pm

No voy a poder estar en el entrenamiento, ya sabes que hacer. Practiquen la nueva rutina.
Madison y Harper tienen que dar 120 vueltas a la cancha

De: Dalia Crowell 4:05 pm.

¿QUE? ¿Por que? Apenas inicia el semestre y ya vas a tener una falta, mejor apresurate, tienes media hora

Para: Dalia Crowell 4:07 pm

No puedo, después te lo explico.

Guardé el móvil en mi mochila y apresuré el paso. Cuando al fin llegué al aula, efectivamente ahí estaba el chico culpable de mis horas extra en la escuela y la directora culpable de la existencia de Madison y Harper.

-Disculpen la tardanza

-Ninguno de los dos se va antes de 5:30 - Dijo Natalie mientras veía a Andrew.

Este sólo rodó los ojos y yo me limité a asentir

Cuando Natalie salió por la puerta yo puse mis cosas en el escritorio donde anteriormente había estado Natalie sentada.

-Hola Andrew, soy Elizabeth Monroe y te ayudaré con algunas materias. No compartimos más que dos clases pero la directora insistió que fuera yo tu tutora ya que...

-No estas en la cancha, puedes dejar de hablar un momento.
Aparte, no se porque la directora me puso como tutora a la capitana del equipo más estúpido y cliché del instituto.- Bufo

Puse los ojos en blanco y el infierno comenzó.