Adaptación, Otra Vida

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"Es mucho para mí, delgada, pero no va a gimnasio; morocha natural desde la raíz hasta las puntas, tez blanca un poco color trigo; ojos marrón oscuros casi llegando a un infinito agujero negro de paz y felicidad; estatura de aproximadamente 1,67 cm, lo suficiente para besarme el cachete; y no más de 60 Kg., también, lo suficiente para que mis débiles brazos pudieran hacer un esfuerzo sobrehumano para levantarla esos días donde estuviera enferma, es perfecta..." continuaba en su mente mientras la miraba por el rabillo del ojo.

-Well, all in order Sr.Banner, so... why do you want to go to U.S.A?

-Uffff, I repeat, I want a new life, get job, and die here, and it's my dream.

-Ok, it will be $6.500 souzands pounds.

-Thank you bye...

El avión despega de Paris dirigiéndose hacia otra vida, otro destino, otro mundo completamente diferente que Nathan /francés infeliz en su país, 1,85 cm aproximadamente, débil de sentimientos y débil de físico, su fuerte era escanear personas gracias a su hábil lógica y a su gran personalidad e inteligencia, rubio de ojos verdes, como los de su padre, estudio inglés, español, griego, italiano, japonés y alemán, abogacía, arquitectura, medicina e investigador, mucho de que elegir no? Pues su gran indecisión no lo llevo a trabajar nunca, ah me olvidaba, jugaba al futbol (27 años)/ no conocía, pasaría de levantarse de un sueño largo, profundo, y muy tranquilo como a él le gustan, y ver a la torre Eiffel, a de despertarse asustado por las bocinas de los autos lujosos y pobres, los gritos que los niños producen al jugar, de gente hablando por la calle, y por últimos ver el Empire State, girar la cabeza hacia el mar, y ver una majestuosidad creada por su patria, regalada a este país, la Estatua de la Libertad.

El viaje le resulto muy raro, era la primera vez que salía de su país en avión, se sentía mal por su familia y todo lo que dejaba allí en aquel lugar, pero lo necesitaba, necesitaba cambiar.

"Welcome to New York", esa voz de esa persona detrás del micrófono en el aeropuerto luego de 7, 8 horas de viaje, ni el sabia con exactitud, le retumbaban en la cabeza muy fuerte entre el murmullo de las personas.


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