Mi Demonio Caido [Louis Tomlimson]

CAPITULO 1:

Capítulo 1:

   Otro nuevo día y otra vez esa misma y horrenda pesadilla. Corrí hacia mi baño y comenze a deshacerme de mi ropa y meterme a la ducha.

   Salí del baño y me puse mi ropa de todos los días un pantalón, una camisa de cuadros junto con mis botas de montar.

   Llege a la cocina y salude a Mónica con una sonrisa y un "Buenos días"  y ella me sonrió poniéndome la hotcakes en la barra junto con miel y un gran vaso de café con leche, desayune y salí de la casa grande y me dirrigi a las caballerizas.
(........)

   Horas después de haber arriado todo el ganado y haber levantado las ventas del ultimo mes ya  era de noche y ese día había hecho mucho calor así que con "Brown" mi caballo me dirrigi hacia el río.

   El agua caía por las cascadas, era hermoso, la luna y las estrellas se reflejaban en el río.

   Baje de mi caballo y lo ate a el árbol mas cercano. Me comencé a quitar la ropa hasta quedar en solo bragas, cubrí mis pechos con mis manos y escuche un sonido proveniente de las ramas, volteo a ver hacia ellas pero no era nada, mi cabeza estaba mal estos días siempre escuchando cosas extrañas y sintiéndome observada y mas cuando dormía.

   El agua estaba en su punto mas delicioso, nade un buen rato, todavía sentía que me miraban, cuando me canse decidí que ya era algo tarde, me volví a cambiar, desate a el caballo,y fui camino a "la casa grande".

   Entre después de haber encerrado a "Brown" en las caballerizas. En la sala me encontré con quien menos quería toparme ' aquí vamos otra vez' pensé.

-¿DONDE DIABLOS TE METISTE? - Fue lo primero que me dijo, o  mas bien grito, al verme.

-De seguro estaba revolcándose con el capataz,¿no es hací?- Pregunto la bruja de mi hermanastra -

- No soy como tu, Veronica - Respondí sonriendo y ella se puso totalmente roja y abrió la boca pero alguien la interrumpió -

-¡YA BASTA! , dime donde rayos te metiste, llevo toda la tarde y parte de la noche buscándote  - estaba furioso se le notaba en su cara totalmente roja -

- Estaba en la presa. - Respondí encojiendome de hombros -

-¿Solo así?, ¿en la presa?, ¿ es todo lo que tienes que decir? - La entrometida y madre de la bruja, mi madrastra -

- Mira no quiero ser irrespetuosa padre, pero ya puedo cuidarme yo sola, no necesito niñeras ya estoy grande - Respondí fríamente, mi padre me veía con esa mirada, con la que siempre oculta sus sentimientos -...........y no vengas a preocuparte ahora que no lo necesito - mi hermanastra me miraba con la boca abierta al igual que mi madrastra -

- Mira niña irrespetuosa.....- comenzó con su sermón mi madrastra -

- Esta bien. - Respondió simplemente mi padre y mi madrastra abrió los ojos como plato al igual que Veronica, las dos sorprendidas - Pero procura no llegar tarde a casa - Yo simplemente acenti y el se fue a su oficina donde vivía siempre -

- Eres una malcriada! - Me dijo mirándome con asco mi madrastra. Yo solo la ignore y bostezando empecé a subir las escaleras -

(....)

   Me encontraba acostada en mi cama mientras miraba a el techo y sentía el viento entrar por mi balcón.

   Mi vida desde que nací no era normal. No soy una chica normal a decir verdad y no me gusta serlo, he vivido con mi padre toda la vida, mi madre? no se absolutamente nada de ella solo se que me dejo el collar que ahora traigo en mi cuello - inconscientemente acaricie mi collar -.

   Nací el 23 de agosto de 1996 ahora con veinte años ya era un poco mayor, crecí en "La casa grande", como muchos le suelen llamar a esta gran hacienda, mi padre me crió toda mi vida, en realidad el nunca era cariñoso conmigo, desde que tengo memoria siempre me ha tratado mal y mas aun cuando llego Valentina, o mejor conocida como 'mi madrastra', se le metió por los ojos a mi papa y a los dos meses de relación se casaron, pero lo que no sabia mi padre es que no venia solo ella si no que traía a su hija Veronica, desde allí se fueron las cosas de mal en peor la poca relación que tenia con mi padre se fue a la borda cuando yo tenia nueve anos desde que mi madrastra y su hija llegaron, ellas eran y son las típicas 'damas de ciudad' nunca han movido un dedo en toda su vida ya que todo lo consiguen con su apariencia, siempre vistiendo con vestidos muy caros y ajustados y tacones de 8 o hasta 12 centímetros, a mi nunca me gusto eso, cuando me conocieron frente a mi padre se portaron muy bien pero cuando estábamos solas mi hermanastra me jalaba el cabello y me insultaba al igual que su madre, empeze a crecer y mi padre les daba lo que quisieran y a mi nunca me compraba nada, aunque yo nunca le pedía nada, y empeze a defenderme de sus comentarios y agresiones físicas.

   Mi padre nunca me defendió eso fue una de las cosas por las que aprendí por mi misma. Así paso el tiempo y ahora yo con veinte anos soy una mujer adulta que se sabe defender y cuidar muy bien sin ayuda de nadie.

   Aveces tenia mis momentos de depresión pero siempre era cuando estaba sola y cuando salia de mi cuarto era cuando les mostraba mi cabeza en alto.

   Mis ojos comenzaron a cerrarse en cuestión de minutos.

-Anne, Anne, mi hermosa Anne....- Una voz masculina y conocida me susurro al oído mientras sentía caricias en mi cabello - Eres muy hermosa....-susurro nuevamente y sentí su suave aliento en mi oído - .....Desearía haberme metido contigo a esa laguna......te veías preciosa....- Continuaba susurrando esa voz y sentí algo húmedo en mi cuello....un beso - Mía y de nadie mas....- Susurro ahora mas lejos y ya no sentí nada mas-.

(.......)

   Me desperté ya que tenia algo de calor, mire mi balcón y estaba cerrado......no recuerdo haberlo cerrado.

   Derrepente me vino a la mente el recuerdo de su voz y su aliento en mi oído y las palabras que me decía....y también el beso. Levante de un salto de la cama y fui a un espejo me ardía mucho el cuello, específicamente donde me beso.

Me detuve frente a el espejo y abrí los ojos como platos a lo que vi.