Pereza

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¿Era normal que hiciera tanto calor?

No, por supuesto que no.

Pero ahí estaban todos los novatos, entrenando bajo el rayo de sol. El ejercicio era sencillo: sacarle el arma a su compañero. Les daban un pequeño cuchillo de madera sin filo a cada uno y los emparejaban con un rival que tuviese la misma fuerza física. Si ganabas, cambias con un compañero más fuerte y si no, con uno más débil.

Claro, todos menos Connie y Sasha. Se podría decir que ellos tenían unos mejores planes. La más alta había robado unas cuantas manzanas de la cocina, con ayuda del joven cadete, pero este le echaría toda la culpa a ella si es que los descubrían.

No es la primera vez que se escapaban, aunque no podían darse ese lujo siempre que quisiesen. Keith, el instructor en jefe encargado del entrenamiento, los tenía muy bien vigilados ya que eran los que más "ahorraban energía". Pero había días en que el instructor no estaba y dejaba a cargo a un soldado de otra tropa.

Los de la policía militar eran los más estrictos, a veces, incluso más que el entrenador. Al parecer tenían un complejo de "oye, yo soy superior a ti en todo sentido", lo que producía un disgusto general por parte de los reclutas.

Son contadas con los dedos de las manos las veces en que la tropa de exploración venía. Normalmente, no ponían tanta presión en los entrenamientos cuerpo a cuerpo y siempre quitaban una o dos horas para contar sus experiencias fuera de la muralla, lo que dejaba a los novatos fascinados.

La mayoría de las veces eran de las tropas estacionarias, ellos son mucho menos atentos que los otros. Para su suerte, hoy les tocó un soldado bastante distraído que pertenecía a esta tropa. Al parecer Eren, Armin y Mikasa lo conocían, ya que estaban hablando animadamente como si fuesen familia o algo íntimo.

Aprovecharon esa distracción para huir sin que nadie se entere. Ni siquiera sus amigos, no querían ser el centro de burlas porque no eran más que amigos. Sólo los tortolitos se escapaban en medio del entrenamiento para ir a hacer "esto" y "aquello". Y esas cosas no entraban en sus planes.

Iban al pequeño bosque que se encontraba cerca de las cabañas de los chicos, donde siempre se protegían del sol y del calor. Si alguien los ve tal vez pondría una escusa como: "¡eh, tengo que descansar antes de estar cansado!". Claro, ¿y si venía un titan? Él no podría protegerse por lo agotado que estaría y la muerte no es algo que quisiese experimentar. Aunque es muy poco probable que llegara un titan adonde estaban.

Mataban el tiempo devorando el alimento robado del día (porque Sasha robaba comida diaria) y teniendo largas conversaciones a cerca de sus raíces, de (como no) comida, de su futuro y algunas otras cosas sin importancia que se olvidan al día siguiente. Cuando los dos están solos siempre aparece ese acento de pueblerina que tanto trata de esconder Sasha. Estaba siendo ella misma y eso le agradaba.

Cuando se aliste a una de las tropas, tendrá que adoptar una actitud sería y madura todo el tiempo, como un adulto. Ya no se podrá divertir como lo hace con Sasha.

Sin duda va a extrañar estos momentos.


Pecados Capitales [Shingeki No Kyojin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora