Capítulo 35

550 20 0
                                    

-Mamá –dije alejándome-
-Perdón –sonrió- buenas noches –beso mi frente- nos vemos en casa, tengo mucho que hacer
Camine hacia donde se encontraba Mike y Zayn, quien se marcho en busca de su auto al estacionamiento, mientras nosotros lo esperamos en la entrada. Tom llego a nuestro lado.
-¿puedo irme con ustedes?, la verdad no tengo muchas ganas de quedarme hasta el final –dijo serio-
-Claro –sonreí-
Tom estaba MUY cambiado, ahora me había dado cuenta. Su pelo rubio estaba más corto y vestía de manera diferente. Ya no estaba con esa típica forma suya de galán, ahora era más “sencillo”. Ya no era el tipo perfecto, extremadamente bronceado y preocupado que coquetear con cualquier cosa que se moviera. Ahora se notaba más “serio” y con mas cerebro.
Sabía que algo pasaba entre Tom y Zayn y no era precisamente algo bueno, trataban de ignorarse todo el tiempo y existía cierta tención que podía notar en el ambiente. 
Al llegar a casa invite a Zayn a pasar, ya eran pasada las 23:30, y no quería separarme del aun.
Subimos a mi habitación, Zayn se acomodo en mi cama mientras yo me ponía pijama. Los tacos y ese vestido me estaban matando, quería algo cómodo. Esperaba que a el no le molestara mi pinta “relajada”.
-¿eso usas para dormir? –dijo mirándome salir del baño-
-¿Por qué es muy fatal? –dije asustada-
La verdad adoraba este pijama, eran un shorts negros con puntos blancos, si alomejor muy cortos con una polera a pabilos blanca. Nada de otro mundo.
-No para nada, me parece sexy –sonrió coqueto-
¿Sexy? Nunca pensé que yo podría lucir “sexy”. Suspire y le sonreí.
-Podríamos ver una película –sugerí acercándome a él-
-claro –asintió- 
-Iré a buscar algo para comer, tu puedes ver alguna que estén dando en la tele o si no, debajo de los libros –le apunte- hay varios DVD’S
Se sentó en la cama y me pidió que me acercara a él. Tomo mi barbilla y la acerco a él. Sentí su respiración, su perfume y lo mejor, su aliento a menta. Sus suaves labios junto a los míos, nunca me cansaría de ese revoloteo en mi estomago y esa electricidad que sentía en mi cuerpo cada vez que tocaba su boca. Nos alejamos y me sonrió, no pude evitar hacerlo también.
Baje a la cocina aun mareada por aquella sensación. Tome un paquete de palomitas, lo puse en el microondas y busque dos vasos, los llene con jugo. Las cabritas ya estaban listas. Subí lentamente hacia mi habitación. Sentí voces, me pareció extraño ¿con quién conversaba Zayn? Me detuve en la entrada.
-Tú no sabes nada de mí –dijo Zayn enojado-

Único en el MundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora