CUANDO TE CONOCI...

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2003 Seúl – Corea

-Señorito Minho ya almorzó? – preguntaba una agradable mujer a un niño de ojos hermosos, grandes y profundamente chocolates

-nee, ajumma, no entiendo quien vendrá? – preguntaba curioso el pequeño de 12 años

-al parecer su padre, invito a pasar el verano a su socio en casa – indicaba la mujer dirigiéndose a la cocina mientras Minho soltaba un suspiro y regresaba al tercer piso donde se encontraba su habitación.

Choi Minho era el único heredero de Choi Hyung Seo que era un importante empresario a nivel de asía, manejando las empresas Choi a través de todo Asia, lamentablemente la suerte en el amor a este hombre no le había sonreído del todo, luego de conocer al amor de su vida, casarse, y tener un hermoso hijo, la mujer había caído enferma, sin importar cuánto dinero se gastaba el Sr. Choi no la pudo librar de la muerte, sumiéndolo en una depresión, cuando Minho aún era un bebe, que prácticamente era cuidado por los empleados en su casa.

Así creció Minho, falto de una madre, y aunque su padre pusiera el mundo a sus pies, lo único que pedía el pequeño Minho era la presencia de este a su lado, pero la mirada grande y profunda del niño le recordaba mucho a su esposa al padre de Minho, por lo que siempre se mantenía alejado.

En ese momento el padre de Minho ingresaba al salón alertando a Minho que se seguramente se encontraba desocupado, corriendo a recibirlo alegremente como siempre lo hacía.

-appa! – gritaba el niño mientras el hombre lo recibía para abrazarlo

-anniong, campeón, te portaste bien? – preguntaba el hombre mientras Minho asentía

-appa! Gane, bueno ganamos el campeonato de futbol infantil en la escuela, no estás orgulloso de tu hijo? – preguntaba Minho mientras el hombre sonreía ampliamente ante las palabras de su hijo

Si bien Minho tenía la mirada de su madre, el carácter, y toda su personalidad, era como la de su padre, competitivo, ganador, exitoso y carismático, incluso a pesar de ser un niño.

-claro que lo estoy!, siempre lo estoy, dime lo que deseas y lo traeré para ti – ofrecía el padre

-salgamos de viaje appa! – pedía Minho ilusionado mientras su padre suspiraba triste y daba una caricia en el cabello ya largo de su pequeño

-lo lamento campeón, no se puede, invite a un amigo a casa, tenemos que atender muchos negocios – indicaba el padre de Minho mientras, haciendo que el chiquillo borre su sonrisa

-appa! Me lo pasare encerrado? – preguntaba ya no tan feliz Minho

-anio! Mi colega tiene un hijo de tu misma edad, bueno creo que es tu hyung porque es mayor por algunos meses, podrás hacer un amigo nuevo – indicaba su padre mientras Minho hacia un puchero de molestia en su rostro

-no quiero nuevos amigos!, solo quiero tiempo con mi padre! ES MUCHO PEDIR! – gritaba molesto Minho

-Minho! Ya hemos hablado esto, por favor no me hagas esto, no hoy, por favor! – pedía su padre con una amable sonrisa idéntica a la de Minho

-Minho, el hijo de mi colega, puede ser un gran amigo, el también perdió a su madre de pequeño, y su padre como yo es un hombre bastante ocupado, las reuniones que tendremos serán importantes probablemente fusionaremos algunas empresas, nos volveremos casi una familia, debido a la fusión seremos la compañía más rentable en Asia, por eso te lo pido, Minho puedes tener un poco de paciencia con tu padre? – pedía el hombre mientras Minho solo lo miraba tristemente y aguantaba las lagrimas, Minho hizo una venia y se dirigió a su habitación.

Amor InocenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora