Prólogo

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Nota de la autora:
Quiero empezar diciendo que si eres Homofobico/a dejes de leer esta novela porque habrá smut. Así evitaremos inconvenientes y comentarios groseros.
Segundo, esto es una novela Larry "Louis y Harry" si no te gusta esta pareja como Esposos (lo que son) repito, deja de leer.
Tercero, habrá un poco de Ziam (y si, él puede haberse salido de od pero me gusta esta pareja como bromance)
Y sin más, espero que esta novela sea de su agrado. :)


L&H.

02-10-14

Abrió la puerta entrando a su casa, había caminado bastante, el recorrido de la casa de Liam a la suya era bastante extenso, 14 cuadras exactamente. Le dolían demasiado los pies gracias a la sesión de fútbol que había tenido con el morocho ese mismo día, más tarde.
"Llegué" grito cerrando la puerta detrás suyo. "¡Mamá! Ya estoy en casa" volvió a gritar esperando alguna respuesta.
"Tuvo una reunión de última hora" dijo su castaña hermana saliendo de la cocina. El suspiró, tirando su gastada y sucia mochila al sofá, dirigiéndose hacia su hermana. "¿Dijo a qué hora iba a volver?" Preguntó dándole un beso en la coronilla y susurrandole un hola.
"¿Alguna vez lo hace?" Preguntó la castaña irónicamente en voz baja. "Te deje un poco de lasaña en el microondas, Lottie está estudiando para su examen de mañana y las gemelas se están bañando para acostarse" le informó mientras miraba a su hermano abrir la heladera, sacando la gran botella de jugo de naranjas y tomando directamente de ella, se limitó a hacer una mueca de asco, pero acostumbrada a ello no dijo nada.
"¿Donde están Doris y Ernest?" Preguntó Louis limpiándose el mentón con su mano (debido a que se derramó un poco del líquido naranja) y guardo el jugo.
Escucho a su hermana suspirar entrecortadamente  antes de responder, dirigió su mirada hacia ella y fue ahí donde noto sus ojos rojos 'había estado llorando' se dijo a él mismo, vio cómo sus ojos se cristalizaban antes de responder con un hilo de voz.
"Dan se los llevó, Lou" vio cómo se deslizaba una solitaria lágrima por las recordetas mejillas de su hermana.
"¿Q-que, de qué estás hablando Fizzy?" Escucho su propia voz quebrarse antes de hablar.
"Yo llegué de la escuela y e-el, él simplemente estaba agarrando toda la ropa de los mellizos, trate de preguntarle qué estaba haciendo, pe-pero el solo me grito que jamás los íbamos a volver a ver y me tiro unas hojas diciéndome que se las dé a mamá para que las firme, que era el divorcio" trato de explicarme, entre todos sus sollozos, me acerqué a ella para abrazarla, no imaginándome lo difícil que habrá sido para ella ver como nuestro padrastro se llevaba a nuestros hermanitos de 6 meses, le iba a preguntar dónde estaba Lottie en ese entonces pero ella continuó explicándome, como si hubiese leído mis pensamientos, "Lottie no había llegado de clases, le dije que están con la abuela pero es men-mentira, ese maldito se los llevó, las mellizas estaban en el parque con Susi y oh, mamá va a estar tan destrozada Louis, no sé qué le voy a decir, yo estaba sola, no pu-u, no no pude hacer nada Lou, no pude hacer nada" rompió a llorar. La acune mejor entre mis brazos y empezé a acariciarle el cabello, en un fallido intento para tranquilizarla. Yo sabía que mamá y Dan estaban teniendo problemas, pero no sabía que era tan grave, aunque prácticamente yo no estaba mucho en casa, solo los había escuchado discutir unas cuantas veces, todas ellas terminaban con mi mamá llorando y con Dan yéndose de la casa, pero volviendo en la madrugada ebrio, la primera vez, él intento volver a subir a su habitación con mamá, pero yo no lo había permitido, impidiéndole el paso posicionándome en la puerta, esa vez llegamos a los golpes, yo solo salí con un rasguño en el labio inferior, pero el término con un corte en la ceja y un ojo morado así que solo se rindió y se fue a dormir a la sala, desde entonces cada que vuelve, duerme en la sala.
"¿No sabes a dónde se fue?" Le pregunte, una vez que Fizzy se tranquilizó más, ella levanto sus ojos hacia mí y movió su cabeza de un lado al otro en señal de negación, y viéndola así solo pude apreciar lo culpable y destrozada que se sentía, ella era la que más cariño le tenía a los mellizos, siempre los cuidaba, aunque teníamos a Susi que era nuestra niñera, Fizzy siempre la ayudaba cuando se trataba de los mellizos. Yo igual estaba afectado, no los veía mucho por el asunto de la universidad, pero siempre que estaba con ellos, disfrutaba de sus risitas chillonas. Pero lo que más me preocupaba era en cómo lo iba a tomar mamá.
"Fizzy, quiero que sepas que nada de lo que pasó hoy en la tarde es culpa tuya ¿está bien? Tú no tienes la culpa de nada" le dije abrazándola de nuevo. "Saldré un momento, creo que sé en dónde puede estar" escuche a Fizzy sorber por la nariz, se separó de mí y cuando estaba a punto de reclamarme algo la interrumpí. "No, no quiero que me digas nada. Escúchame, mientras no estoy quiero que me ayudes con las gemelas, quiero que te encargues de ellas si? Que se duerman temprano y eso, y si Lottie pregunta por mí, dile que me quedé haciendo un proyecto en donde lo de Liam, yo volveré antes que mamá, ella usualmente llega a las 23:15, así que no te preocupes ¿está bien?" Ella asintió mirando hacia la ventana, todavía podía sentir lo dudosa y preocupada que estaba.

Salí de mi casa, como alma que lleva al diablo. No puedo negar que estaba bastante enojado con el cobarde de Dan, irse así y llevarse a los mellizos no era nada maduro y mucho menos hombre.
El ya había caminado tanto que para ese entonces no sentía sus piernas, estaba seguro que ya no quedaba rastros de las calorías que había conseguido comiendo la caja de pizza con Liam en su casa.
Iría a la casa de la mamá de Dan, estaba seguro que el jamás podría con dos niños de 3 meses solo. Simplemente era mucho trabajo, aún más para alguien que ni tenía contactos con su hijo por estar tan ocupado en el trabajo.
Louis llego a la pequeña casa amarilla en donde solo vivían los padres de Dan y toco la puerta como loco, sentía la adrelanina correr por sus venas, su madre no merecía nada de esto, no merecía haber fracasado en 3 de sus matrimonios, no merecía un alcohólico como esposo y mucho menos merecía que le arrebaten así a sus pequeños hijos recién nacidos.
Sin recibir respuestas por ya bastante tiempo, entro con la cara roja de furia a la pequeña sala, el pensó encontrarse a un Dan intentando poner bien un pañal, o mínimo, a la mamá de Dan dándole en biberón a alguno de los mellizos, pero jamás imaginó encontrarse con esa escena.
Un hombre de largo cabello rizado, con una boca roja brillante, sus labios mojados y tan rojos que hasta se podría decir que parecían pintados, una cara de pánico con las mejillas levemente sonrojadas, ojos verdes, oscuros y profundos, tatuajes por doquier, brazos bien trabajados, un vientre plano y un gran, gran pene, apretado por unas manos con largos dedos.
"¿Harry?"

El primer capítulo será publicado el 12.02.16

Sabré que eres tú. (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora