Eres un cobarde que no supo valorarme, poco a poco me fuiste perdiendo y no te importó mi sufrimiento, Fuiste como una piedra en el zapato, mientras yo mas caminaba para luchar por nuestro amor mas me dolía...
Aprendí con cada pasó que daba que no valía la pena luchar así por alguien y mucho menos si ese alguien eres tú...
Aprendí que se lucha por quien se lo merece.
Aprendí que no se debe llorar por dolor sino por felicidad.De Ahora en adelante mì felicidad no dependerá de nadie.
Si rió sera por mí,
si lloró sera de felicidad,
Si corro será para sentir el viento en mi cara...Por lo único que te voy a estar agradecida es porque me enseñaste que nunca jamás debería volver a enamorarme de alguien como tú...