Broken Memories (En pausa pero en planes de continuación)

Capítulo 1: Perdida en compañía de un desconocido

Capítulo 1: Perdida en compañía de un desconocido

Hace ya un tiempo, en tierras lejanas de una belleza indescriptible. Una hermosa joven de cabellos dorados y ojos verdes, despertó a orillas de un lago de aguas tan claras que daban la sensación de ser un espejo al verse reflejado en ellas, sin tener la más mínima de idea de cómo llego allí.

La rubia miro a su alrededor sin reconocer nada de lo que veía y con un fuerte dolor de cabeza que le atormentaba, entonces se levanto un poco y  se sentó para contemplar el frondoso bosque que rodeaba el lago y  tratar  de recordar que era lo que había sucedido, mientras luchaba fuertemente por ignorar el dolor en todo su cuerpo.

Entonces, luego de tratar en vano de recordar algo, volvió la vista tras de sí y noto algo a lo lejos tendido en el suelo justo en el comienzo del camino que se adentraba al  bosque y tras meditarlo un poco decidió ponerse en pie y acercarse mientras cojeaba un poco debido a los golpes que había recibido su cuerpo.

Finalmente logro llegar hasta el lugar y se pudo percata de que no se trataba de algo sino de alguien, quien al parecer se hallaba inconsciente con el rostro clavado en la tierra. De inmediato se alarmo al pensar que pudiese estar ya sin vida y como pudo le volteo, percatándose de que llevaba un garfio donde algún día quizá, se hallaba su mano y contemplando finalmente el rostro de aquel hombre; quien era realmente apuesto y cuyos cabellos negros lucían esplendidos a pesar de que un poco de tierra les cubriera.

-¿Se encuentra bien? ¿Puede oírme?-

Comento alarmada sin recibir respuesta alguna de parte del sujeto y entonces apoyo su rostro sobre el pecho de este para percatarse de que su corazón aun latiese y por suerte aun lo hacía aunque débilmente. Levanto su rostro del pecho de este y se puso de rodillas junto a él contemplando su rostro que pese a estar golpeado no dejaba de ser fascinante, aunque eso era lo que menos importaba en aquel momento pues bien sabia que debía hacer algo por salvarle la vida aunque no tuviese la más mínima idea de quién era.

La joven de cabellos dorados miraba de un lado a otro sin saber exactamente que debía hacer, entonces volvió a acercarse a él, esta vez poniendo una de sus manos bajo la nariz de este para rectificar que continuase respirando. Entonces mientras ella permanecía concentrada en la respiración de este, él le apreso repentinamente la mano y finalmente abrió sus ojos que eran de un precioso color azul en los que a cualquier mujer le encantaría perderse completo.

Ella se quedo perpleja sin saber qué hacer.

Verle ahora consciente resultaba aun más fascinante a la vista.

-Me hubiese encantado que me despertaras con un beso, preciosa-

Menciono con una voz extremadamente sensual y le dedico una amplia sonrisa, entonces una ligera sonrisa  de escepticismo se le dibujo a ella en los labios y de inmediato libero su mano de la de él para ponerse rápidamente en pie y comenzar a adentrarse en el bosque dejando a este atrás aun tendido en el suelo.

-¡Hey, hermosa! ¡No me dejes! ¡Vuelve aquí!-

Al escucharle gritar, volvió la vista hacia él.

-¿Por qué debería hacerlo? No te conozco y mucho menos me agradan los hombres de tu tipo, así que…adiós-

Comento y volvió la vista hacia el bosque mientras él se ponía en pie y trataba de alcanzarle con las dos piernas cojeándole.

-¿Qué? No ¡no puedes irte! ¿Acaso no estabas tratando de ayudarme hace un rato?

De nuevo la joven de cabellos dorados volvió la vista hacia él, quien ahora estaba de pie frente a ella con mirada suplicante y una sonrisa seductora dibujada en los labios.