18:59 P. M.

17 2 0
                                    

Al explorar la zona, me dí cuenta de dos cosas.  La primera,  que si había encontrado tanto material en un Infestado, lograría averiguar la verdad, quién propagó la enfermedad y como remediarla. Cuando me dirigí a mi casa,  sentí curiosidad y abro el sobre azul que encontré en el Infestado. En el no me pude creer lo que ponía...
¡!Ponía una dirección¡!
No, no, lo siento, yo nunca me he dado bien con las direcciones...
No ahora ni nunca. Pero, al ver la dirección, caí en mi error...  La dirección me sonaba de algo, la tenía casi casi en la punta de la lengua.

La misión imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora