Capítulo 2

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Cuando entro al pequeño cuarto donde voy hacer atendida el medico que me ve pone una cara como de ¿un fantasma?, o algo así parecido por la cara tan pálida que tenía, parecía un papel cuando un niño de tres años lo raya con color amarillo, bueno así; el Doctor me indica que me siente en la camilla.

¿Como te sientes?- Preguntó

Me siento muy bien de hecho sólo vine a conocer este hospital y también a usted - Dije en tono irónico

Por poco se le sale la risa pero no lo hace por "profesión ".

Abiel- mi madre con su tono de regaño alargando la i la e, hace que no siga.

Bueno esta bien ¿Abiel?- dice el Doctor

Yes - le respondí

Tu cara me lo dice todo ¿que es lo que te sientes? Y ¿desde cuando estas así? -pregunta

Hace una semana, mi madre pensó que era un malestar de los que les da a la mayoría de personas que después se pasará, pero como ve no se me ha pasado, he sentido un desgaste en mi cuerpo; mi tos es seca y tengo dolor de cabeza que se me va por ratos y luego aparece con dolorosas punzadas- Digo seriamente.

¿Qué has Tomado Abiel? -Pregunta el Doctor

Varios medicamentos para el dolor, malestar y congestión -dije

Después de una pequeña charla con el Doctor este me manda a hacer unos exámenes médicos para saber con exactitud que es lo que tengo.

Me sacaron sangre, de por cierto me dolió mucho, me abrieron los ojos y sólo veía una luz ya que me colocaron una lamparita que eso tampoco me gustó.

Esperé aproximadamente dos horas más acostada en la camilla, me dormí un rato; cuando llega el Doctor con una cara inexpresiva, mi madre entra, y yo me quedo viéndolo a esperar que hable.




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