Hora de aventura fiolee COMPLETADA!!

capitulo 2

Marshall se veía bastante confundido y algo asustado. Gumball estaba impaciente por que Marsh le diera una respuesta. Cake estaba durmiendo. Y yo... yo estaba bastante confundida, igual que Marshall, pero por otro motivo muy diferente. Cuando entramos a su casa, Marshall me ignoró todo el camino hasta su sala. Y cuando nos ibamos a sentar me dedicó una mirada de pesar. Como si se arrepintiera de algo. 

-Y bueno Marshall, dinos que tienes que ver tú con la reina helada o mas bien con Simoné?- Gumball ya no podía esperar mas. 

-Es una larga historia. Una historia que solo quería mantenerla para mí. Porqué quieren saber de ella. Ademas eso fué millones de años atrás.- se le notaba triste y por un momento se perdió en sus recuerdos. 

-Necesitamos saber Marshall, es importante que nos cuentes- esta vez Gumball fué mas comprensivo y no le alzó la voz. 

-Supongo que no me queda alternativa- y comenzó a contarnos su triste historia, de como encontró a Simoné, como ella lo acompañó y le demostró su cariño. También como cada vez que se encontraban en peligro, ella usaba la corona y cómo fue perdiendo los recuerdos. Hasta que Marshall tuvo que seguir su propio camino porque junto a Simoné ya no se sentía seguro. Jurando que jamás la olvidaría y siguiendo sus pasos todo el tiempo, cuidando que no se haga daño a si misma. Cuando Simoné decidió usar la corona siempre, Marshall contempló triste como su mejor amiga lo olvidaba para siempre. 

Creí ver una lágrima resbalando por su mejilla, pero de inmediato se levantó y nos dió la espalda. 

-Ahora que lo saben, diganme para que querian saber. 

Esta vez fui yo quien habló 

-Marsh, Simoné te recuerda.-el rey vampiro se volvió incredulo- Hoy estuvo gritando tu nombre y luego se presentó con nosotras como Simoné. 

-De verdad? Debo ir a verla- Gumball lo detuvo.- que sucede chicle?? Debo ir a verla ella es mi mejor amiga! 

-Perdió la memoria después de eso.- Marshall se quedó mirandolo fijamente. 

-No me importa, ahora es cuando más me necesita, ya la abandoné, no lo volveré a hacer. No de nuevo. 

Dicho esto, cogió su sombrilla y salió volando hacia el reino helado. Gumball y yo nos miramos, ambos con pena por la historia de Marshall. Cake seguía durmiendo dentro de mi gorro, ajena a todo el drama.

MARSHALL 

Me volví invisible y entré al palacio de Simoné. A pesar de que ya han pasado miles de años yo seguía llamandola asi. No pude creerle a Gumball, mi corazón quería desesperadamente creerle, que Simoné haya recuperado su memoria significa recuperar a aquella persona que me trató como un hijo, la unica persona que me hizo sentir protegido. La única persona en la que confíe. 

Era recuperar mi felicidad. 

La vi buscando a Gunther, usaba la corona de nuevo. Cada vez que la veía con ella, me hacía acordar esa tarde dentro del carro, cuando se puso en riesgo para conseguirme una sopa. Ese día en el que casi la perdí completamente. Estaba hablando sola, como casi todos los días. Hablando sobre como secuestrar a algún príncipe. Cuando de repente Gunther se le lanzó a la cabeza derribando su corona.  

-Gunther niña mala, eso no... se...- se agarró la cabeza fuertemente y comenzó a gritar mi nombre. Me escondí detras de una pared porque pensé que me había descubierto. Pero luego escuché un sollozo. 

-Marshall! Perdoname, te prometo que no me la volveré a poner. Lo prometo, pero no te enojes conmigo.-asomé mi cabeza por la puerta y la ví arrodillada con las manos en la cara. Me fuí acercando y me hice visible una vez que estaba a su lado. 

-Simoné?- pregunté poniendole mi mano al hombro. Ella levantó la mirada al oír mi voz. 

-Marshall? Eres tú?- asentí. Reprimiendo una lagrima- No puede ser, tu eras pequeño hace unos minutos.- parecía descolocada. La ayudé a incorporarse. 

-He crecido y ya soy grande. Simoné, no estoy enojado contigo- ella me miró dudosa un momento. Y luego se lanzó a mis brazos. La abracé con fuerza. 

-Vaya cambio, supongo que ahora ya no puedo llamarte pequeño verdad?- se separó de mi y observó que estaba flotando. -y veo que ya desarrollaste tus podreres de vampiro. 

-Pues si ya soy un vampiro completo, y ya no sería lo mismo si no me llamas pequeño. Aunque ahora soy grande y puedo protegernos de todo. Ya no es necesario que uses la corona. 

-Pequeño... hay algo que debes saber.... la corona es lo unico que me mantiene viva. Si no la uso envejeceré más rápido y moriré.- me miró con pesar esperando mi reacción. Pero a mi solo me vino un nombre a la cabeza: Bubba. 

Él era el único capaz de hacer que Simoné siga viviendo. 

-Ven, acompáñame, te llevaré al dulce reino. Gumball sabrá que hacer. 

La tomé de la mano, pero ella se quedó estática en el suelo. Luego se encogió y se agarró la cabeza. Estuvo asi un rato y luego no se movió. Hizo que me preocupara. 

-Simoné! Estas bien? Simoné!- ella no respondía, y si se había ido? Y si por estar sin la corona el proceso de envejecimiento había acelerado? Un dolor profundo se instaló en mi frio y muerto corazón- Simoné!! No me dejes! No puedes dejarme de nuevo.- la levanté salí por la ventana. El sol ardía y quemaba toda mi piel haciendo que casi todos mis sentidos se anularan. Sentía como poco a poco iba perdiendo el conocimiento, debí coger mi sombrilla antes pero no habia tiempo, tenía que llegar de una manera u otra al dulce reino.

FIONA 

Regresamos al dulce reino después de quedarnos un rato fuera de la casa de Marshall, pensando sobre lo sucedido. Hacia bastante sol, era un hermoso día en Aaa, y prometía ser tranquilo. Me equivoqué. Antes de llegar al dulce reino vimos un bulto prendido en llamas cayendo en picada frente a nosotros. 

-Es Marshall y la reina helada!- exclamó Cake, quien ya estaba despierta. Se lanzó hacia ellos para protegerlos de la caída, a la vez que apagaba las llamas envolviéndolos con su piel. Cuando pisó el suelo, los llevó al dulce hospital. 

Gumball y yo corrimos hacia la torre. Cuando llegamos, no me dejó entrar y tuve que esperar afuera. Mi corazón no paraba de golpear desde que vi a Marshall cayendo, prendido en fuego. El pánico invadía todo mi ser. Si ántes tuve dudas sobre mis sentimientos hacia Marshall, ahora se habían esfumado, dando paso al miedo a ser rechazada. De pronto Gumball salio por la puerta, se le notaba el pesar en la cara. Empezé a imaginarme lo peor. 

-Y?- inquirí. Gumball solo sacudió la cabeza. 

Mi mundo se fué de cabeza.

AHORA SI!! QUE LES PARECE? JAMÁS SE IMAGINARON QUE LA QUE SE ENAMORARIA PRIMERO SERIA FIONA. PERO AUN FALTAN ACLARAR ALGUNAS COSAS ANTES QUE NADA. ESPERO QUE LES GUSTE Y ESTEN SIGUIENDO LA HISTORIA. DE TODAS MANERAS ME GUSTARIA QUE DIERAN ALGUN INDICIO DE SU EXISTENCIA, ASI COMO COMENTARIOS O VOTOS O ALGO ASI, NO ES MUCHO PEDIR, ESO ME DA MUCHOS ANIMOS PARA SEGUIR ESCRIBIENDO