EL TREN DE LA MEDIANOCHE

CAPÍTULO 12

En realidad estaba equivocada respecto a Liam. No es tan idiota como pensaba. Y hablando he descubierto que es de mi edad aun que aparente más.

- ¿Prueba, verdad o atrevimiento? - me pregunta él.

- Verdad.

- ¿Verdad que estás loca y secretamente enamorada de mi? - pregunta intentado poner voz sensual y acercado su cara a la mía.

- No es verdad - le respondo yo mirándole a los ojos - me toca.

- Adelante - dice él - soy como un libro abierto. Pero por eso elijo prueba.

- Ja, te creías que te ibas a librar de preguntas - y sonrío maliciosamente - mi prueba es que me cuentes tu historia.

- Vale, allá voy. Me llamo Liam y estoy en el último curso. Vivo en una casa en frente de la de mis padres. Bueno, vivía. He subido a este tren por que vengo del entierro de mi madre que se murió por cáncer.

- Lo siento - digo con voz triste.

- Tú no tienes la culpa - dice con una media sonrisa.

- Si no quieres seguir no sigas - le digo.

- No importa. Vivo con mi prima que es como si fuera mi hermana por que desde pequeño ella me ha ayudado como si fuera mi madre aun que solo nos lleváramos un año y medio.

Un gran silencio cae sobre nosotros. Ya no me apetece más helado. Al poco rato rompo el silencio incómodo con la primera pregunta que me viene a la mente.

- ¿Y te gustan los animales? - pregunto.

- Me gustan bastante. ¿Y a ti?

- También.

- ¿Cuál es tu animal favorito?

- El pájaro.

- ¿Por qué?

- Jolin Liam esto parece un interrogatorio.

- Simplemente quiero saber más de ti - dice sonriente.

- Me gusta el pájaro, pero no el típico que tienes en una casa encerrado, si no los pájaros del parque, los de la selva. Me gusta verlos en libertad porque es una cosa que yo deseaba y muchas veces me gustaría ser como ese pájaro del parque que se acerca al banco donde tu has estado a buscar restos de migajas. Ese pájaro que vuela en libertad todos los días desde que sale el sol. ¿Y tú?

- Yo tengo un perro - dice él muy orgulloso

- Yo siempre he querido uno y cuando me fui a vivir con en Innombrable...

- Espera - dice Liam riendo - ¿el Innombrable?

- Si, ¿ algún problema? La verdad es que no quiero ni nombrarlo.

- Bueno continúa.

- A lo que iba. Me compró un cachorrito. Yo estaba muy contenta con el perrito pero un día de los que el Innombrable llegó borracho a casa dijo que solo traía problemas así que cuando yo dormía él lo abandonó - a Liam se le fue la sonrisa de la cara.

- Oh. Siento haber preguntado pero tú no tendrías que habérmelo contando - dice arrepentido.

- Tranquilo - respondo sonriendo - no importa. Además empiezas a caerme bien.

- Si lo que pretendes es picarme no lo vas a conseguir - y sonrie con aire de suficiencia.

- Ohh vamos cállate.

Silencio incómodo.

- Oye - dice Liam - ¿sabes cómo huelen los helados?

- Nunca lo he pensado - digo extrañada. Así que cojo un poco de helado con la cuchara y lo acerco a la nariz y en ese momento Liam le empuja a la cuchara hacia arriba y termino con la nariz llena de helado de chocolate y caramelo.

- Traidor - digo intentando sonar enfadada, pero no lo consigo.

- Uy Alison, eso nunca.

Y sin que él se lo esperara dejo caer lo que queda de mi helado por su cabeza.
No puedo dejar de reírme.

- Cuando te coja ya verás - dice él.
Entonces empieza a perseguirme por todo el vagón y me alcanza. Hace que lo mire a los ojos.
- Esto no acaba aquí - y con una sonrisa maligna me coge como un saco de patatas y me lleva al baño.
Una vez allí me mete debajo de la ducha y noto como el agua tibia me moja y consigue que mi camiseta se pegue a mi cuerpo.

- Estas muy sexy así - dice y sonríe maliciosamente.

Entonces nos miramos a los ojos y nos empezamos a acercar y cuando estamos a punto de besarnos giro el grifo de la ducha hacia la fría y enseguida nos separamos.

- Tendrías que haberte visto la cara - intento seguir pero la risa me lo impide.

- Eres mala Alison - dice queriendo parecer enfadado.

- No te lo cres ni tú - y ambos empezamos a reírnos.

Luego cogemos unas toallas y nos secamos.

- Oye Alison toma esto - dice abriendo la mano y dejando ver una preciosa cadena de plata con un colgante en forma de corazón que dentro tiene dos pájaros en unas ramas - tómalo como un regalo.

- ¿Por qué ?

- Porque somos amigos ¿no?

- Claro - respondo sonriendo - me ayudas - digo tendiéndole el collar. Y me lo pone.

- La verdad es que te queda muy bien.

Me miro al espejo. La verdad es que si que me queda bien.

- Gracias - digo muy contenta - ¿Pero de dónde lo has sacado?

- Tranquila no he cometido ningún delito si es lo que piensas.

Y seguidamente salimos del baño.

Salimos al vagón y me siento observando el exterior con ganas de salir.

-No me gusta estar encerrada aquí - digo

-Creo que a nadie-dice Liam

Y empiezo a pensar en todos los momentos en los que mi exnovio no me dejaba salir de casa sin su permiso, y cuando decidía todo por mi.

- Tampoco me gusta que decidan por mi.

- Quieres salir fuera y no te gusta que decidan por ti, eres un pájaro sin alas.

- ¿Pájaro sin alas? - le pregunto confusa.

-Si, pájaro sin alas, quieres volar libre, tomar tus propias decisiones, como un pájaro, pero, pájaro sin alas porque un pájaro sin unas alas que le ayuden a volar no vuela, te faltan las alas - dijo sin mirarme.

- ¿ Y que se supone que son esas alas?

- Confianza - dijo

- Tampoco me iba a servir mucho ser un pájaro con alas si estamos encerrados en una jaula.

- Si supongo que el tren no ayuda mucho - y mostró una sonrisa con esos perfectos hoyuelos.

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Hooolaaaa pajarillos!!!!

Ogghjjfdsssfvbjyrdd LIAAAMM

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