Conociéndonos

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La chica se levantó una vez más y decidió ir al cuarto de alado, vio una pequeña figura correr a la esquina de la habitación y decidió acercarse para verificar que era, cuando pudo observar con claridad se dio cuenta que se trataba de un innecesario, un sueño para ser precisos, irónico lo que más odiaba estaba delante de ella quiso lanzarle una daga pero algo inexplicable le decía que lo dejará pasar esta vez, bueno nada perdía con dejar vivir a uno, ¿no?
Decidió que como el sueño era pequeño lo dejaría vivir por supuesto que estaría dentro de una jaula o crecería y las demás la matarían a ella y al sueño, además la cantidad de problemas, que, dejarlo crecer causaría no era conveniente, por lo que decidió no alimentarlo, no tocarlo y solo observarlo. Ya arreglaría los problemas con las demás después; por el momento solo le ordenó al pequeño innecesario no moverse o le mataría, busco la jaula pequeña y un lugar para ponerla pues no quería que la descubrieran tan pronto.
Una vez teniendo el lugar dispuesto regreso a la habitación donde el innecesario se encontraba, puso la jaula en el piso y con una voz fuerte, firme y demandante le ordenó que entrará en la jaula, el innecesario temeroso obedecio, una vez que ella lo tubo dentro tomo la jaula y la colgó en aquel rincón medio oculto que eligió para esconderlo suspiro se sentó en el suelo y centro su atención en el innecesario al fin de cuentas era lo más interesante ahí además de lo que si estaba vivo aparte de ella y las que estaban afuera.

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