Eres mío

[Capítulo 9]

Me despierto desorientada, miro a mi alrededor y no se donde estoy, entonces vienen unos recuerdos a mi cabeza mostrándome donde me encuentro, me levanto despacio de la cama y miro mi móvil, son las 4:00 de la mañana, decido levantarme e ir hacia la cocina a por un vaso de agua, mi garganta esta seca y lo necesita.

Me dirijo silenciosamente hacia el salón cuando una sombra aparece de repente, cierro un poco mis ojos para poder ver de quien se trata, cuando un hombre de ojos penetrantes me mira, trago saliva y espero.

-Hola, ¿Qué haces levantada?, son las 4:00 de la mañana- su voz es viril y grave y mis oídos la captan al momento.

-Lo mismo podría decirte yo a ti- me mira de una manera que me da miedo y decido contestar adecuadamente- perdón, he ido a por un vaso de agua-agacho la cabeza avergonzada por mi osadía, es mi jefe por dios, veo como asiente con la cabeza y me dirijo a la cocina a por ese vaso de agua que tanto necesito ahora mismo, después de verlo se me ha resecado la boca.

Cuando vuelvo hacia el salón observo como abre la tapa del piano y comienza a tocar, me paro a unos metros y escucho la melodía, es una canción clásica, muy armoniosa y que suena genial tocada por el, me acerco y me fijo en sus grandes manos, como se deslizan por el piano acariciando cada tecla, me doy cuenta de que me esta mirando y mis ojos de dirigen a los suyos y nuestras miradas bailan al compás de la música lenta, veo como me hace un hueco en el pequeño banco de madera refinada y me siento, estoy tentada en seguir la melodía, que demonios no tengo nada que perder, me coloco bien y empiezo a tocar a mismo tiempo que el, nuestras miradas se cruzan una vez mas y la tengo que desviar ya que no me atrevo a míralo a los ojos estando tan cerca de el, me viene a las fosas nasales su fragancias huele a menta fresca suave, mi corazón empieza a latir desbocadamente por estar tan cerca de este hombre, sin darme cuenta nuestras manos se han juntado en un tramo del piano y la suya esta encima de la mía, las observo detenidamente y veo como el entrelazan nuestros dedos, levanto la vista y me lo encuentro mirándome fijamente, sus pupilas se han dilatado y se esta acercando peligrosamente hacia mi, cuando sus labios están cerca de los míos no se que hacer y en un acto reflejo me levanto y me dirijo casi corriendo a la habitación, cierro la puerta y me dejo caer contra ella, mis ojos están encharcados de lagrimas y no se porque, el es mi jefe y yo soy su empleada no puedo hacer esto, esta mal, decido levantarme y me dirijo a la cama y cuando cierro los ojos mi mente me lleva unas horas atrás, recordando como sus labios casi tocan los míos.

<<...>>

Me despierto con un dulce olor a comida y a café recién echo, me levanto poco a poco de la cama y camino hacia la puerta, sigo el aroma a café que sale del salón y veo la mesa del comedor montada, con tortitas, tostadas, cereales, galletas, zumo recién exprimido y el dulce néctar que es mi droga, el café.

-No sabia que tomabas así que he hecho un poco de todo- me giro bruscamente para encontrarme con sus ojos y cuando lo hago bajo la mirada avergonzada recordando lo que paso anoche.

-No hacia falta que te molestases

-No es molestia, por favor toma asiento- hago lo que dice y comienzo a servirme café y tortitas, veo como se sienta a mi lado y se sirve zumo y galletas, desayunamos en silencio y cuando ya estoy llena mi móvil empieza a sonar, miro la pantalla y leo: Evan

-Disculpa un momento- me levanto y me dirijo lejos de donde esta el- Hola- mi tono pasa de cansada a dulce

-Hola hermanita, como te encuentras- su voz me tranquiliza

-Bien, estoy en... en casa, con Anne, pasando la mañana- me río, pero es una risa nerviosa, ni yo me creo esta trola.

-Si ya...- se que no acaba de creérselo pero el continua- te he llamado para decirte que vendré a visitaros a mama y a ti

-¿De verdad?, eso es una gran noticia, me alegro mucho- continua hablando con el hasta que veo como Dylan me observa desde el pasillo-Bueno te tengo que colgar, luego hablamos.

-De acuerdo pequeña, te quiero- sonrió por ese apodo cariñoso que me puso.

-Yo también te quiero- cuelgo y me dirijo hacia el salón para recoger lo que he ensuciado-Dylan... quiero decir señor Parker, me gustaría que me llevara a mi casa, si no es mucha molestia-veo como su mirada se endurece y asiente con la cabeza.

El camino en coche transcurre en silencio, cuando frena delante de mi casa bajo sin decir ni una palabra y me dirijo hacia mi puerta cuando de repente alguien me gira bruscamente y unos labios se posan con los míos, abro los ojos alarmada y descubro que es Dylan, su lengua entra en mi boca de manera posesiva, como si estuviera marcando el territorio, de mi sale un pequeño gemido y respondo al beso sin saber porque, cuando nos hemos quedado sin aliento se separa de mi y me susurra al oído.

-Recuerda esto- me muerte el lóbulo de la oreja y me deja ahí plantada en medio de la acera sin saber que hacer.

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Hola familia!!!! Se que llevo tiempo sin subir capítulo, lo siento pero los exámenes es lo que tienen, que te absorben todo el tiempo, bueno espero que es os guste y si es así dadle una estrellita, comentad y seguidme.

Besos

PD: Ya hay mas de 200 lecturas, se que para muchos no es mucho pero para mi es genial, muchas gracias a esas personas que me leen y les gusta la historia