Blood Ties -Luhan Chen Fanfic-

Capítulo 31

...¿Volvió el amor?...

No lo creía. Luhan estaba frente a mi y lo más probable era que había escuchado todo lo que había hablado con Dara, sobretodo la última parte.

-Lu... -dije al reaccionar- Luhan.

-¿Luhan está ahí? -escuché que dijo Dara por el celular.

-Habla Vania, qué fue lo que dijiste hace un momento -habló con un tono más alto de lo normal.

-Dara, te llamo luego.

Asenté el celular y me levante para acercarme a Luhan. Tal vez él había escuchado mal y al final podría salvarme.

-¿Desde cuando estás aquí? -pregunté deteniendo mis pasos de manera que mantuviéramos una distancia adecuada entre ambos.

-Desde que te oí nombrarme... algo sobre que hablar conmigo es complejo -dijo muy serio.

Cerré los ojos al darme cuenta que había escuchado la parte más importante de la conversación. No entendía cómo demonios era que podía ser tan sigiloso al entrar a algún lugar. No era la primera vez que llegaba a la casa sin hacer nada de ruido.

-¿No sabes que escuchar conversaciones ajenas es de mala educación? Además, ¿por qué tienes la estúpida costumbre de entrar sin hacer ruido?

-Creí que Huang estaría durmiendo y no quería despertarlo -dijo acercándose a mi- Y en este caso debí ser mal educado ya que estabas hablando de mí.

-¿Y qué si estaba hablando de ti? -hablé molesta- Aun así no tenías derecho de escucharlo.

-Vania -él terminó de acercarse a mi y tomó mi muñeca- ¿Tan malo es que me entere de eso?

-¿De qué hablas Luhan?

-Lo que le dijiste a Dara -continuó- Que tú estás enamorada de mí.

Entré en pánico al darme cuenta de que sí había escuchado bien.

-Luhan, yo no...

Estaba dispuesta a decirle que había escuchado mal hasta que él habló.

-No lo niegues -sentí como su mano aplicó mayor fuerza en mi muñeca- Si en verdad lo sientes, por favor no lo niegues.

Y todas mis paredes se vinieron abajo. La manera en la que me miraba, hacía que me derritiera por dentro. Sentí que le haría daño si seguía negando mis sentimientos por él y de un momento a otro decidí hablarle con toda la verdad.

-Yo no quería que lo supieras porque... -empecé a hablar, pero no sabía cómo continuar.

-¿Por qué Vania?

-Tenía miedo y no me preguntes de qué porque no lo sé. Simplemente creí que manteniéndome callada podría ser mejor.

-Pues tu forma de pensar no es para nada sabia -dijo antes de soltarme y alejarse un poco dándome la espalda.

-Lu... yo también lo siento de verdad. No estaba dentro de mis planes enamorarme de ti y estaba realmente asustada cuando me di cuenta.

-¿Cuándo te diste cuenta? -preguntó girándose para verme.

-El día de la cena.

-Por eso huiste todo el día -concluyó.

Asentí con la cabeza sin saber qué más hacer o decir. Sentía que mi confesión lo había cambiado todo.

-Está bien Vania -su rostro se suavizó un poco, pero su voz seguía siendo en un tono serio- Debemos actuar como los adultos que somos y no dejar que esto nos afecte. ¿Puedes hacerlo?