Carta número 41.

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Catorce de Febrero...

Pensé que pasaría este día sola, viendo películas, quizás llamando a una amiga.

Pero entonces, recordé una pequeña promesa tuya. Prometiste no faltar dicho día, sin embargo, no le presté atención a ese recuerdo. Quizás lo habrías olvidado.

Pero no, ¡NO! ¡NO LO OLVIDASTE!

Aquí te presentaste, creo que no tengo palabras para describir la emoción que sentí en ese momento.

Olvidé todo, mi vergüenza, nuestras peleas, mis lágrimas, todo. En ese maldito momento nada importaba, tú y yo. Nadie más, amor.

Hablamos toda la tarde, pediste perdón por errores que cometiste en el pasado, hice varias confesiones, sentí que era la primera vez que podía mirarte a los ojos sin miedo a que descubrieras que estoy enamorada de ti, me mostré lo más natural que alguna vez fui contigo.

Luego de que te fuiste, publicaste una foto que nos habíamos tomado cuando estabas en mi casa, la chica con la que estás, se molestó al máximo, y me sentí mal por ella, me sentí como una perra, pero por Dios, eres mi mejor amigo, ¡TIENES DERECHOA TENER AMIGAS!
La cosa fue que le dijiste que tenía que respetarme y que YO era tu "Bae"

Sinceramente, estoy más que feliz!

***

BAE: Before Anyone Else.

(Antes de cualquier persona)

Cartas que nunca llegarán. | Premios #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora