Soñador de mil mundos

26 0 0
                                    


Una noche de Abril, en algún lugar de la ciudad.

La gente critica, es normal para mí, las cosas nunca serán perfectas, lo sé, pero no puedes estar esperando que sea como en tus sueños si no haces nada para lograrlo.

Cada vez que me dicen algo sobre una idea, un sueño que anhelo que suceda, nunca es nada bueno, la gente esta tan encerrada en su mundo de imposibilidades que no se dan cuenta que lo único que tienen que hacer es ponerse manos a la obra, no me mal interpreten no soy de los típicos activistas que hacen todo para cambiar a la gente, yo no trato de meterles ideas a la cabeza, ellos mismos tienen que ser capaces de hacer algo, pero que importa el pensamiento de un chico de 17 años, nadie me tomaría en serio, creen que por ser jóvenes no tenemos idea de los sentimientos que vivimos día con día, conozco a personas menores a mí que tienen ideas y pensamientos más acertados en la mayoría de los adultos que reprimen esas ideas, ¿qué hay de tener una mente abierta? Vamos, es el siglo 21 no podemos seguir teniéndole miedo al cambio; Y hablando de cambios, hoy es mi último día en la ciudad siento que hay mil y una situaciones en las que podría estar en mi nueva escuela, nuevo ambiente, nuevas personas, lo único que pido es encontrar a alguien que piense como yo, tengo amigos si, Caleb y Tobias son mis mejores amigos Caleb es casi como mi hermano llevamos mucho tiempo juntos, creo que más de una década y a Tobias lo conocí al elegir como paraescolar de deportes, ya van 3 años de eso y probablemente gracias a ello mis días han sido más que divertidos.

En tan solo unas horas me estaré marchando a un lugar totalmente distinto sin ellos, no sé si será bueno pero lo que sé es que hay mil y una posibilidades de encontrar amigos, pero solo una de encontrar amigos como Tobias y Caleb, y sin contar a Cloe; ella es prácticamente mi primer amor, es la chica con la que sueño día tras día, pero no todos pueden tener su final feliz y probablemente yo no lo tenga, se preguntaran el porqué de mi negatividad, no los culpo yo también lo haría.

Cloe es la ex novia de Tobias, cortaron porque las cosas entre ellos no eran como antes, la química fue desapareciendo y chocaban en muchos aspectos, ¿saben la frase de "los opuestos se atraen"? es mentira, no tienes que ser igual a alguien y menos contrario si quieres una buena relación, creo que esa fue la razón más fuerte para que rompieran. He pensado en invitarla a salir varias veces pero no he reunido el valor suficiente como para decirle a mis amigos lo que quiero hacer, verán, hay reglas no escritas que hacen que la amistad perdure, la norma a la que me refiero consiste en que ningún miembro del grupo puede insinuarse o ligarse a cualquier chica que anteriormente haya compartido una relación con algún miembro del grupo sin permiso; eso significa que tengo que pedirle permiso a Tobias, es la única manera en la que podría tener una oportunidad, les parecerá algo infantil, pero gracias a ello no hemos tenido ningún tipo de problema.

Y ahora me doy cuenta que cometí un error al decirle lo que siento a Cloe después de tanto tiempo,  solo estoy acostado en mi habitación medio vacía con estos pensamientos que no me servirán de mucho en estos momentos más que para decirme a mí mismo lo tonto que fui al haber tomado el riesgo tan tarde, esa chica me encanta en serio, no es como las demás eso es seguro, sus ojos azules su cabello castaño, sus labios carnosos, y es que con solo pensar en ella me emociono y hasta planeo una vida con ella, y la verdad no sé si me hablaba en serio, o si compartía el mismo pensamiento que yo.


Ese mismo día por la mañana, en el instituto.

-¿En serio lo harás?- Pregunta Caleb con cierto asombro – Cal, Llevo demasiado tiempo escondiendo mis sentimientos, al menos si le digo hoy, no habrá pierde- Le contesto.

-Lo entiendo pero ¿qué tal si te dice que también te quiere?, no podrías hacer nada para cambiarlo, creo que hasta te conviene que te batee.

Le miro, tiene razón, pero nada me impedirá que le diga todo a Cloe, cada minuto que no le digo es más incertidumbre para mí, que tal si quiere lo mismo, que tal si nunca pudo pasar, me consume la duda.

-Caleb, solo deséame suerte, por favor- Le respondí casi suplicando. –Seré el primero en decir te lo dije, pero suerte amigo- Me da una palmada en la espalda y me empuja levemente animándome a intentarlo. Me acerco lento, pero seguro, Vaya está hermosa, trae puesto un vestido floreado morado y una cola alta, que solo hace que se destaque más su figura, que por cierto, es la más bonita, no es por ser fijón pero mis ojos la repasan una y otra vez, me causa una felicidad que no puedo explicar; me sudan las manos, estoy nervioso, no hay duda de ello. Me mira y me saluda con una sonrisa de oreja a oreja, sé que estoy empezando a ser repetitivo, pero en verdad es muy hermosa, me da un escalofrío pero no me desanimo, camino rápido a ella y la saludo de beso, un saludo algo diferente, fue directamente darle un beso en la mejilla, hace una cara de sorpresa pero, no se molestó, la conozco lo suficiente como para saber que le gusta y que no le gusta.

-Hola Cloe, Te vez radiante- Directo y seguro, no creo que este mal, creo...

-Hola, muchas gracias de verdad- dirige la mirada a su vestido y luego a mí - ¿y eso que estas cariñoso? Me sorprendes- sigue sonriendo pero esta vez sin mostrar los dientes, ¿en serio nunca le había demostrado cariño? Bueno, supongo que los nervios me hacen actuar más directo.

-Desperté con ánimos, de hecho quiero hablarte de algo, ¿puedes?- trato de hacer cara de súplica, nunca me ha fallado, es algo así como mi arma secreta.

-Supongo que sí, tengo libre inglés - cierra su mochila y se la cuelga en el hombro, no creo que este muy convencida, lo hare igualmente.

-Cloe, hace unos años te conocí al haber entrado a el instituto, inmediatamente sentí que seriamos amigos- Le dije, fue calmado, y ella al yo haberle recordado la historia sonrió y me interrumpió.-Hablando de eso, yo también tengo que decirte algo, veras, cuando entre vine con la mente totalmente abierta y llena de posibilidades, también vine con la mentalidad de que tendría un novio aquí, quería que tu fueras mi primer novio...-se sonrojo y se puso a juguetear con una de sus pulseras, la que yo le di en su cumpleaños 17 hace 6 meses atrás, no me había dado cuenta, pero nunca se la quitaba, incluso si íbamos a una fiesta no se la quitaba, pero, la llevaba porque le gustaba, o porque yo le gustaba, bien, lo admito, fui muy poco observador, mi error. No sé qué decirle, esto me tomo por sorpresa totalmente abro los ojos todo lo que puedo, en verdad estoy sorprendido.

-Zack, Me gustas desde que te vi, sé que yo también te gusto, o gustaba, hice mil y un señales, solo para que te dieras cuenta, nunca lo hiciste, Tobias era muy lindo conmigo pero, siempre que estaba con él pensaba en ti, solo te preguntare una cosa; ¿Por qué no me invitaste a salir?- La expresión en su cara ya no es de Felicidad, es de tristeza, al terminar esa última pregunta me mira directamente a los ojos, ¿que se supone que tengo que hacer? ¿Besarla? No sería como una excusa, estaría mal, solo le diré.

-Cloe, perdón, me gustas mucho, pero nunca pensé que tu también compartieras mis sentimientos, y créeme que nada me hubiera hecho más feliz que haber estado contigo, ser tu novio, soñé tantas noches contigo, con tu sonrisa, con tu mirada, en uno de ellos eras mi reina y yo tu rey de un castillo que construí solo para ti, de algo que pienso que sería capaz de hacer y nunca lo hice, Cloe, Te amo. – ¿El castillo que soñaste era de piedra rosa?- Dijo –Si, ¿cómo lo supiste?

-Porque yo también te soñé conmigo, soñé una vida a tu lado.

Sueños Compartidos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora