IX

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Pero todo necesita un final, y huir eternamente es imposible.

Los encontraron. Los encontraron abrazados, dormidos en un lugar al Norte del Cielo y en algún lado al Oeste del Infierno. Y, como si de niños se tratase, los llevaron a casa, y los arroparon, y el demonio descansó al calor del Infierno y el ángel en la suavidad de las nubes del Cielo.

Y sus sueños se fundieron en la claridad del alba, olvidados, polvorientos, puestos de cualquier manera entre la pila de cosas viejas y la lista de cosas por hacer.

Angel Or DemonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora